La muerte de Kim Jong Il impacta en la población surcoreana

A muchos de los ciudadanos les sorprendió la noticia al salir a comer y durante la hora del almuerzo ha sido la conversación estrella, iniciada con la pregunta: “¿Aún no te has enterado? Ha fallecido Kim Jong Il”. Otros que estaban de compras no han dudado en agolparse frente a las pantallas de los departamentos de electrónica de centros comerciales, como el I-Park Mall en Yongsan, en Seúl, para ver en directo el informativo especial.

Sin duda la televisión –que en Corea del Sur asimismo funciona a gran velocidad en los dispositivos móviles– ha sido uno de los medios más usados para seguir la noticia, ya que resultaba impactante la imagen de la locutora norcoreana , vestida de negro y visiblemente compungida por la noticia. Pero también las redes sociales, especialmente activas en Corea, y los blogs han actuado como agente propagador y multiplicador de la noticia. La red social más ágil para comunicar titulares, Twitter , echaba humo tan sólo unos minutos después del comunicado. Incluso algunos diarios coreanos han sacado una edición especial que abre con la noticia de la década y que estaba en la calle tan sólo un par de horas después de aparecer las primeras informaciones.

Por su parte, las autoridades surcoreanas han convocado una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad Nacional tras conocerse la muerte del líder norcoreano . Así, el jefe de Estado se reunirá con el ministro de Asuntos Exteriores, el de Defensa y el de reunificación nacional, entre otros, para tratar de evaluar las consecuencias de tan funesta noticia, así como las posibilidades de sucesión y otras cuestiones de seguridad.

Por su parte, la reacción del parqué en Seúl tampoco se hizo esperar, ya que el KOSPI, el índice de la bolsa, caía más de 60 puntos respecto a su cotización del pasado viernes. Pese a ello, las empresas surcoreanas más directamente implicadas, es decir, las ubicadas en la localidad norcoreana de Gaesong, no han parado su producción e intentan mantener la normalidad al máximo. Así las cosas, y pese a lo impactante de la noticia, la sociedad civil surcoreana está tranquila y, pese a la incertidumbre, a la espera de las indicaciones que en cualquier sentido puedan provenir del gobierno surcoreano. Quizá una probable consecuencia inmediata sea la cancelación del tercer diálogo de alto nivel que, entre EEUU y Corea del Norte, estaba previsto para el próximo 22 de diciembre en Beijing, si bien las fuentes oficiales aún no se han pronunciado al respecto.