La historia de Giuseppe Girolamo, el músico que cedió su sitio en un bote del Concordia

La desesperación y la angustia de su familia crece por momentos y sus parientes no han dudado en viajar hasta la isla para poner fotos del joven por el pueblo. «Si sabéis cualquier cosa, llamadnos» , dicen los carteles.

Al parecer, Giuseppe Girolamo fue visto por última vez el viernes por la noche sobre el puente junto a miles de pasajeros esperando a ser rescatado . Un testigo cuenta que «había un puesto en el bote salvavidas, pero se lo cedió a un niño».

Desde aquel momento se perdió cualquier pista del músico. Nadie sabe nada de este joven de 30 años con pelo largo y ojos oscuros. Un joven que ama el póker y la música y que se embarcó en el Costa Concordia como batería de la banda Dee Dee Smith el pasado mes de octubre, según publica «Corriere.it».

Sus amigos han creado una página en Facebook para recopilar los mensajes solidarios y de ánimo a la familia. «Sabemos que estás por ahí, hazte oír»... pero por el momento no se tiene ninguna pista de Girolamo.

En la lista de desaparecidos se encuentran además la peruana Erika Soria, de 26 años, que trabajaba como camarera en el crucero y a la que vieron saltar a una de las lanchas, pero después no se han vuelto a tener noticias suyas.

También formaban parte del personal del Costa Concordia, un húngaro que trabajaba como bailarín y un indio. Los otros cinco italianos desaparecidos son William Arlotti y su hija de 5 años, Maria D'Introna, Maria Grazia Trecanico y Lucia Virzi .

Además de estos, se encuentran desaparecidos cuatro franceses, los estadounidenses Gerrald Heil, de 69 años, su mujer Barbara, de 70 y trece alemanes ya que uno ha sido quitado de la lista tras llegar a su casa pero no dar aviso a las autoridades de su paradero.