Suscribete a
ABC Premium

La llamada de teléfono de despedida a su madre mientras el Concordia se hundía

Una de las pasajeras del crucero afondado en la isla italiana de Giglio, Angela Castellani, rezó un Padre Nuestro junto a su madre a través del móvil cuando el crucero se llenaba de agua

abc.es

«¿Mamá? Soy yo. Es terrible. No sé si nos veremos más. El crucero se está hundiendo y todavía no hemos podido ponernos a salvo. No, no, no llores. Rezamos mamá , rezamos juntas también por las personas que conmigo están a punto de ... morir». Angela Castellani, una músico de Mantova de 35 años, viajaba en el Costa Concordia junto a su marido, Diego Schiavo, obrero de 35 años.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia