Fillon renuncia a presentarse a las legislativas

El «eterno número dos», como se le conoce en la política francesa, había sido favorito para ganar la presidencia de Francia hasta finales de enero, cuando una investigación destapó el escándalo de los empleos ficticios . Tras conocer los resultados del domingo, Fillon reconoció que era su derrota, no la del partido, y pidió el voto contra la extrema derecha y para Macron .

«La corriente de Fillon da señales de mantener una cierta influencia sobre la campaña legislativa de su partido, aunque se aparte. Una vez pasados estos comicios y si se dan resultados mediocres para Los Republicanos, se van a matar entre unos y otros discutiendo si optar por una línea dura, blanda o centrista », asegura a ABC el analista de CNews Harold Hyman.

La fragmentación ideológica republicana lleva a que algunos líderes del partido se sitúen muy cerca de la ultraderecha lepenista, pero también otros del social liberalismo apuesten por Macron. «No sabemos si volverá Nicolas Sarkozy , una vez más, o Alain Juppé , de la línea más centrista. Pero si el Partido Socialista está muerto, Los Republicanos están en fase terminal» , añade Hyman.

Sincero, hombre de Estado y honesto eran algunas de las etiquetas con las que Fillon se alzó en las elecciones de su partido hasta que estalló el escándalo. El ya excandidato, elegido diputado por París en las últimas legislativas , afirmó este lunes que seguía pensando que la línea política del partido responde «a las esperanzas de una gran parte de los franceses, en una síntesis entre libertad y autoridad, tradición y modernidad, patriotismo y Europa».

La pregunta que se hacen los analistas franceses es si el domingo fue Fillon quien salió derrotado o su mal resultado venía marcado por una nueva era política en Francia. «Creo que la derrota de Los Republicanos estaba prevista, no por falta de adhesión de los franceses a la visión de este partido, sino por crisis de representatividad. Los franceses quieren ver la vida política renovada y eso explica tanto la victoria de Macron como la derrota de los dos partidos tradicionales . Pero lo que nos debe inquietar más es el 38% de franceses que dicen estar dispuestos a votar a Le Pen dentro de 15 días», sostiene Barah Mikail, fundador de la consultora Stractegia.

Aunque con otro candidato más centrista tal vez podría haber llegado a la segunda vuelta, el auge de En Marcha y el Frente Nacional pueden acabar con el futuro político de los Republicanos si no consiguen buenos resultados en las legislativas de junio. La obstinación hasta este lunes de Fillon por presentarse a las presidenciales puede marcar el futuro próximo de su partido.