Falsas confesiones y multitud de teorías conspirativas

Duranet las tres décadas que han transcurrido desde el crimen se han producido numerosos hechos, algunos más curiosos que otros.

Confesiones falsas: Hasta el momento son 127 las personas que desde 1986 se han declarado culpables de haber asesinado al primer ministro sueco Olof Palme.

Coste de la investigción: La investigación del asesinato de Olof Palme ha costado a las arcas suecas alrededor de 600 millones de coronas, unos 60 millones de euros.

Recompensa: Desde el asesinato de Palme el estado sueco ha ofrecido una recompensa de 50 millones de coronas suecas, unos 5 millones de euros, por cualquier pista que condujera al autor del magnicidio. Nadie ha recibido ese dinero.

150 libros sobre el caso: Además de contar con página propia en Wikipedia, se han publicado alrededor de 150 libros sobre el asesinato de Olof Palme que profundizan en las diferentes líneas de investigación o que alientan algunas de las numerosas teorías conspirativas surgidas alrededor del caso.

Otros sospechosos: El 17 de marzo de 1986, uno de los principales sospechosos, el conocido como el hombre de los 33 años, fue arrestado. Se trataba de un individuo de extrema derecha que se encontraba cerca de la escena del crimen el 28 de febrero. En su apartamento se encontraron panfletos contrarios a Palme. El hombre fue liberado por falta de pruebas, se mudó a los Estados Unidos y allí fue asesinado en enero de 1994; un oficial de policía fue condenado por el asesinato.

La CIA y la URSS: El movimiento secreto de resistencia Stay behind, apoyado por la CIA, podría haber estado detrás del asesinato de Palme. El motivo, las estrechas relaciones de Palme con la Unión Soviética, su amistad con Fidel Castro o su oposición a la guerra de Vietnam.

Ejército sueco: Miembros de la policía, así como de la policía secreta y del ejército sueco de extrema derecha sueca consideraban a Palme un traidor y conspiraron para asesinarlo. La teoría de que fueron ellos los que le asesinaron se basa, entre otras cosas, en los testigos que declararon haber visto a personas comunicar con walkie-talkies mientras vigilaban el paseo de la pareja Palme desde el cine Grand a lo largo de Sveavägen.

Interrogatorio al asesino: Estos son alguno de los fragmentos del interrogatorio policial a Stig Engström, el hombre de Skandia, que pudieron haber alertado a la policía sueca: «Tal vez el asesino es un solitario, un lobo solitario, que aparece sólo y sin haberlo planeado»; «Personalmente, yo hubiera usado un arma más flexible, más pequeña, - si hubiera sido el asesino.»