Detienen a tres trabajadores de la fábrica incendiada en Bangladesh por negligencia

Un funcionario administrativo, un gerente de almacén y un supervisor de seguridad de la planta textil Tazreen Fashions han sido detenidos y serán investigados por ser sospechosos de negligencia, según ha informado el jefe de la Policía de distrito de Dacca, Habibur Rahman.

Rahman también ha comunicado que sus hombres están investigando las denuncias de algunos de los supervivientes en las que atestiguan que los gerentes de la fábrica impidieron que los trabajadores huyeran del edificio cuando sonó la alarma de incendios. Los representantes de la fábrica Fashions Tazreen aún no han hecho ningún comentario al respecto.

El ministro del Interior de Bangladesh , Mohiuddin Khan Alamgir , declaraba que según la investigación preliminar, el incendio de la planta textil Tazreen Fashions fue un "acto de sabotaje". Hoy, la Policía ha arrestado a dos personas que intentaban prender fuego a unas pilas de algodón en otra fábrica de la zona, localizadas gracias a un vídeo grabado por la cadena China Central Television (CCTV).

Otros dos incidentes, un incendio en una fábrica el lunes por la mañana y una explosión con incendio en unas instalaciones el martes por la tarde, han generado preocupación entre los líderes de la industria textil que temen que el sector esté siendo atacado.

"Hoy el Gobierno dice que huelen a sabotaje. No sabemos aún que significa eso, pero lo sabremos en los próximos días", ha declarado a Reuters el expresidente de los Fabricantes de Ropa de Bangladesh y de la Asociación de Exportadores, Annisul Huq. "No sé que información poseen pero no nos gusta esa conexión", ha añadido.

Mientras, miles de trabajadores del sector textil se han manifestado este miércoles por tercer día consecutivo en el cinturón industrial de Ashulia, en las afueras de Dacca, donde se encuentra la fábrica.

Según los testigos, al menos 20 personas han resultado heridas en enfrentamientos con la Policía, cuando éstos intentaban disolver a los manifestantes que exigían fábricas más seguras y castigo para los responsables del incendio mediante el uso de gas lacrimógeno y de las porras.

Según los bomberos de Bangladesh, desde 2006, al menos 500 personas han muerto en accidentes en plantas textiles. Tras este aparatoso incendio, los grupos de defensa de los Derechos Humanos han hecho un llamamiento a las grandes marcas para que pongan en marcha un programa de seguridad contra incendios.