El descontento popular en Italia deja a muchos votantes en casa en las municipales

No se trata de una prueba para Monti, sino para los partidos políticos. En concreto será una indicación sobre cuál será el futuro de los partidos de la «extraña mayoría» –así la llama el propio Monti– que apoyan al Gobierno. Los resultados darán a entender mejor las posibilidades que tiene el profesor de llegar a final de la legislatura, prevista para la primavera del 2013. Y serán también un test para la llamada antipolítica, en la que el rey es el cómico Beppe Grillo , que lidera el Movimiento 5 Estrellas.

El primer dato significativo de estas elecciones es la notable abstención. A las diez de la noche de ayer, la afluencia a las urnas había sido del 49,66% , lo que supone una caída del 6,20% en relación con los anteriores comicios municipales, cuya afluencia a la misma hora había sido del 55,86 %.

La abstención de los electores es el mejor termómetro para medir el descontento popular hacia la clase política, que en Italia se hace cada día más profundo y patente, porque ha perdido toda credibilidad. En estos cinco meses de gobierno tecnócrata de Monti, los partidos políticos han hecho muchas promesas para renovarse y adquirir credibilidad. Pero todo se quedó en grandes anuncios . En la sustancia, muy poco. El terreno estaba abonado para el populismo y la demagogia de Beppe Grillo. Hoy se podrá valorar con qué resultados.