Las autoridades han logrado llegar hasta el joven, que confesó casi de inmediato su implicación en el asalto al ser interrogado por los agentes durante el martes por la noche. La Policía asegura que, tras haberle ofrecido una detallada declaración del suceso, no existen motivos para creer que esté mintiendo.
El portavoz de la Policía, Terje Kaddeberg Skaar, ha informado este miércoles de la implicación del joven, señalando que no existen «pruebas concretas» de que «haya más de una persona» detrás del ataque.
Las víctimas son un joven de 14 años, identificado como Jakob Abdullahi Hassan, estudiante noruego de origen somalí de noveno grado -en una escuela cercana-, y Tone Illebekk, una noruega de 48 años que trabajaba como cuidadora .
La Policía ha descrito al detenido como parte del círculo social de Hassan, si bien no existe aún ninguna relación con Illebekk.
Las autoridades tampoco han dado ninguna explicación al ataque. «El acusado ha dado una información que es detallada, pero no vamos a hacerla pública. Es importante para la Policía que esta información no se revele», ha señalado Skaar.
El joven fue trasladado a un centro de salud mental.
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