El autor del tiroteo en un cine de Luisiana había recibido tratamiento psiquiátrico

Houser recibió tratamiento psiquiátrico en 2008 y 2009 por una enfermedad mental no revelada, indicó el sheriff del condado de Russell (Alabama), Heath D. Taylor, donde Houser residía en esa época.

Houser arrastraba serios problemas financieros desde principios de los 2000, y su esposa le denunció en 2005 por presuntos malos tratos , explicó el sheriff, aunque no se le llegó a detener.

En 2008, su familia solicitó una orden de alejamiento y pidió en los juzgados que se internase a Houser en un centro psiquiátrico, algo que lograron, y éste ingresó temporalmente en un hospital de Columbus (Georgia).

En sus acusaciones ante la corte, la familia aseguró que Houser había « perpetrado varios actos de violencia doméstica », describió su comportamiento como de «desorden bipolar», aseguró que se le había prescrito medicación para ello, pero que «no siempre la tomaba» y expresó su temor de que hubiese «más violencia» en el futuro .

Houser, que en la actualidad no tenía una residencia permanente y que hacía años que no mantenía ningún contacto con su familia, entró anoche en el abarrotado cine Grand 16 de Lafayette (Luisiana), donde se proyectaba la comedia romántica «Trainwreck» y, a los 20 minutos de comenzando el film, se puso en pie y la emprendió a tiros.

El resultado fueron dos jóvenes muertas , Mayci Breaux, de 21 años, y Jilliam Johnson, de 33, y otras nueve personas heridas de diversa consideración, además de su propio fallecimiento al volver el arma contra sí y dispararse cuando se vio acorralado por la Policía.

El arma que usó Houser fue una pistola semiautomática adquirida legalmente en una tienda de empeños de Phenix City (Alabama), informó la Policía.

De los nueve heridos, cuatro ya han sido dados de alta, mientras que otros cuatro permanecen en el hospital en condición estable y otro sigue hospitalizado en condiciones críticas.

Del lugar de los hechos la Policía ha recuperado 15 casquetes de bala.

«Fue lento y metódico. Fue una barbarie . No iba dirigido contra una persona en particular», indicó hoy en rueda de prensa el gobernador de Luisiana y aspirante a la candidatura republicana para las elecciones presidenciales de 2016, Bobby Jindal.

«Mis sentimientos son de gran tristeza y de fuerte rabia. Lafayette, ¡saldremos de esta!», concluyó el gobernador, quien evitó pronunciarse sobre el control de las armas de fuego en el estado.