Hollande: «Debemos combatir, juntos, las filiales terroristas que siembran el odio»
El presidente francés dice en la cumbre internacional celebrada en París que no hay tiempo que perder en la lucha contra el yihadismo
Juan Pedro Quiñonero
François Hollande ha abierto con solemnidad la Conferencia por la paz y la seguridad en Irak , que tiene por objetivo «definir una estrategia global de lucha contra el Estado Islámico (EI), humanitaria, política y militar».
Iniciativa franco-norteamericana, la Conferencia reúne a representantes de ... Naciones Unidas, la Liga árabe, la UE y veinticuatro Estados occidentales y árabes/musulmanes, con el fin de echar los cimientos de una solidaridad a geometría variable, cuyo objetivo más importante es la cobertura diplomática de una nueva guerra/intervención en Irak.
El presidente Obama anunció una intervención aérea contra las posiciones del EI en la que también pudieran participar Francia y el Reino Unido.
Washington, París y Londres esperan que algunos aliados musulmanes confirmen su eventual intervención o colaboración militar, en unos campos de batalla de confuso perímetro geográfico. En ese punto concreto, ningún Estado musulmán se apresura a confirmar su presencia activa en ningún frente militar.
En su presentación de la Conferencia, Hollande ha insistido en la importancia del capítulo «ayuda y reconstrucción». En términos menos elípticos, los participantes en el frente militar de la nueva guerra de Irak esperan que los aliados musulmanes aporten fondos «lo más cuantiosos posibles».
Un inflamable «frente» europeo
La nueva guerra de Irak irá más allá de las fronteras iraquíes. Los bombardeos aliados también estarán dirigidos contra las posiciones del EI en el sur de Siria. Unidades del arma aérea francesa han comenzado a realizar operaciones de «reconocimiento».
En Irak, ha recordado Hollande, dos millones de personas fueron desplazadas en los dos últimos años. En tres años, el conflicto sirio se ha cobrado 200.000 muertos.
En su presentación de la Conferencia, el presidente francés también ha insistido en la gravedad inflamable de un «frente» europeo de la guerra en curso: «Debemos combatir la amenaza terrorista en nuestros propios países. Debemos combatir, juntos, las filiales terroristas que siembran el odio en nuestros países, arrastrando hacia el abismo a muchos de nuestros jóvenes».
La Conferencia debiera concluir este mismo lunes con un manifiesto de «solidaridad global» con la «integridad» de Irak, aportando al «nuevo» gobierno iraquí solidaridad humanitaria, política y militar.
Los mejores especialistas estiman que la nueva guerra de Irak «durará años».
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