Al menos 69 muertos por una explosión en una fábrica de piezas de coches en China

A tenor del «Diario del Pueblo», altavoz del Partido Comunista, la explosión tuvo lugar en un taller donde se pulen las piezas metálicas de la fábrica, como llantas para las ruedas. La planta, que tiene 450 empleados y se ubica en el parque económico y tecnológico de Kunshan, trabaja para el gigante estadounidense del automóvil General Motors.

En el momento de la explosión, había 200 trabajadores en el lugar del siniestro, que pudo deberse, según los funcionarios locales citados por Xinhua, al «polvo» que se había acumulado en el taller de pulido, que salió ardiendo por una negligencia. Según la televisión estatal CCTV, los dos jefes de la planta han sido detenidos .

Los equipos de rescate sacaron 40 cadáveres del interior de la fábrica, mientras que más de 20 heridos murieron camino del hospital. Las espeluznantes imágenes difundidas por los medios chinos muestran decenas de cuerpos calcinados a las puertas de la factoría , de la que emerge una densa columna de humo. Además, numerosos heridos, con quemaduras de diversa gravedad, han sido evacuados de las instalaciones en camiones.

«Cada diez minutos llega una ambulancia con heridos pero, como es fin de semana, estamos cortos de personal y hemos tenido que pedir apoyo», explicaba a Xinhua el personal del Hospital de Medicina Tradicional China de Kunshan, que ha tenido que enviar a algunos de los pacientes a ciudades cercanas como Suzhou, Wuxi y Shanghái. Desde el Hospital Ruijin de esta última ciudad se han desplazado doctores y enfermeras especializadas en quemaduras, ya que los hospitales locales están «abarrotados de heridos».

La fábrica ya ha sido desalojada para investigar las causas de la explosión, que ha tenido lugar después de que una planta petroquímica en Changzhou, también en la provincia de Jiangsu, saliera ardiendo el jueves por la noche sin provocar víctimas mortales. En junio del año pasado, 120 trabajadores perecieron en el incendio de un matadero de aves en la provincia de Jilin, al noreste de China. Tal y como demostró la investigación posterior, el siniestro se debió a la falta de medidas de seguridad en la planta. A la espera de conocer las causas de la explosión en la fábrica metalúrgica de Jiangsu, este nuevo accidente vuelve a poner de manifiesto la inseguridad laboral en China.