¿Por qué David Cameron carga contra los inmigrantes?

El primer ministro británico anuncia nuevas medidas para frenar supuestos abusos en las prestaciones sociales, un discurso que sostiene desde hace tiempo y obedece a motivos electorales

¿Por qué David Cameron carga contra los inmigrantes? REUTERS

abc

01/08/2014
Actualizado a las 13:43h.

En los últimos tiempos el debate sobre la integración de los inmigrantes y los supuestos abusos de la población extranjera en el sistema de prestaciones sociales protagonizan la política británica. El anuncio del primer ministro David Cameron de que limitará de seis a tres meses ... el periodo en el que los extranjeros comunitarios pueden recibir el seguro de desempleo, entre otras medidas, es solo la última acometida de su gabinete contra los inmigrantes, a los que ha colocado en el foco de su actuación política y de la controversia pública. La tendencia no es nueva.

Cameron ha hecho del euroescepticismo y de la crítica a lo que califica de excesos de la integración europea uno de sus caballos de batalla y ha prometido un referéndum a celebrar en 2017 sobre la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea . Londres culpa a la libre circulación de personas que implica la pertenencia a la UE de un presunto flujo de inmigrantes comunitarios que llegarían a su territorio con la intención de vivir de los subsidios del generoso sistema local. Bruselas considera que este es un mensaje que no coincide con la realidad y que el equipo de Cameron infla el fenómeno por razones electoralistas.

Cameron intenta contrarrestar con estos mensajes antieuropeos y casi xenófobos el auge del Partido por la Independencia del Reino Unido ( UKIP ), que en las últimas elecciones europeas confirmó su ascenso haciéndose con cerca de un tercio de los votos gracias a un discurso nacionalista y reaccionario frente a la inmigración. Cameron es consciente de que la formación que lidera Nigel Farage está seduciendo a gran parte del electorado tradicional conservador y trata de contener la hemorragia subrayando su perfil de duro y acercándose al nervio sentimental del más clásico orgullo británico. Para tapar el agujero a su derecha, Cameron se desplaza hacia la derecha.

Lo que no está claro es si esta estrategia puede resultar ganadora a medio plazo. Cada vez más analistas interpretan que muchos votantes pueden acabar pensando que si Cameron va a acabar siendo un remedo de euroescéptico, ¿por qué votarle a él y no directamente a los euroescépticos? Además, como quedó claro en la reciente pugna política por el reparto de los cargos y del poder en las nuevas instituciones comunitarias , la posición de Cameron despierta de todo menos simpatías entre sus socios europeos y lo condena al aislamiento en la siempre necesaria batalla por la construcción de alianzas en la política bruselense. De momento, parece que para el premier británico sigue pesando más el cálculo electoral doméstico.