La Policía desaloja tres campamentos de inmigrantes en el norte de Francia

Los desalojos, que han sido denunciados por organizaciones defensoras de los derechos humanos, habían sido anunciados hace una semana por las autoridades locales, con el argumento de que los campamentos suponían una amenaza para la salud pública y la seguridad en la zona.

Calais ha atraído en los últimos cuatro años a cientos de inmigrantes que huyen de la pobreza en países en conflicto como Afganistán e Irak, muchos de ellos con la esperanza de cruzar el estrecho en ferry o en tren para llegar hasta Reino Unido.

«Es triste y no cambia nada», ha asegurado Jalal, un iraquí de unos 20 años de edad mientras observaba cómo la Policía entraba en el campamento para su desalojo. « Llevaré mi tienda a otro lugar... pero me quedo aquí . ¿Qué más puedo hacer? Intentaré hacer otra vez el paso. No he venido aquí para abandonar», ha explicado.

Muchos de los entre 600 y 800 inmigrantes que residen en esos tres campamentos ya se habían marchado de allí antes de que se anunciara el desalojo ordenado por el prefecto de la región de Pas de Calais , Denis Robin.

Pas de Calais se encuentra en la zona noroeste de Francia, donde el Frente Nacional ha logrado el 34 por ciento de los votos en las elecciones al Parlamento Europeo celebradas en el país vecino el pasado domingo.

La formación que lidera Marine Le Pen ha hecho campaña a favor de una drástica reducción de la inmigración y ha manifestado su rechazo al espacio europeo sin fronteras Schengen, que permite la libre circulación de ciudadanos comunitarios entre los países de la Unión Europea.