Campaña de amenazas a «Der Spiegel» por un artículo crítico con Erdogan

Tanto, que el «hashtag» #VetealinfiernoDerSpiegel se convirtió en trending topic. Kazim asegura haber recibido más de 10.000 correos electrónicos, tuits y mensajes, algunos de ellos bastante amenazadores, como: «Si te vemos en la calle, te cortaremos la garganta». Muchos de estos mensajes de Twitter iban acompañados de la fotografía del reportero, para poder reconocerlo.

Según Kazim, la campaña parece organizada: «Se ve que algunas de las cuentas de Twitter solamente me siguen a mí, y no tienen otros contactos», ha explicado al diario alemán «Frankfurter Allgemeine». Los responsables del semanario han decidido primar la seguridad de su corresponsal frente a la cobertura, según han indicado a otros medios, y han preferido que regrese a Alemania.

Kazim parece haber sido elegido como símbolo de lo que Erdogan calificó de «noticias falsas y maliciosas» diseminadas por «los medios extranjeros» durante la cobertura de la tragedia de Soma, según aseguró esta semana en una reunión de su partido. No es la primera vez que sucede algo así en Turquía: el verano pasado, la corresponsal de la BBC Selin Girit también comenzó a recibir amenazas en las redes sociales tras haber sido acusada por el alcalde de Estambul, Melih Gökçek, de ser una «espía británica». Durante la cobertura de las protestas antigubernamentales por el parque Gezi, también la reportera de CNN Christianne Amanpour y otros periodistas extranjeros fueron objeto de campañas de intimidación semejantes.

El incidente se produce apenas días antes de la visita de Erdogan a la ciudad alemana de Colonia, prevista para este sábado. Un viaje que promete ser polémico, como lo han sido otras visitas anteriores del primer ministro turco a Alemania. Pero ahora, además, arrecian las críticas hacia el gobierno turco, tanto por su creciente autoritarismo como por episodios como los que han rodeado la tragedia de Soma , en el que uno de sus asesores pateó a un manifestante , y el propio Erdogan llegó a agarrar por el cuello y lanzar insultos antisemitas contra otro vecino de la localidad.

La visita de Erdogan parece ser una etapa no declarada en la campaña de cara a las elecciones presidenciales del próximo agosto, en las que tienen derecho a voto aproximadamente dos millones de los turcos que residen en Alemania. Sin embargo, el propio alcalde de Colonia, Jürgen Roters, ha pedido que el evento sea cancelado.

«Para mí, como político responsable, la decisión estaría clara: dados los drámaticos sucesos con tantas muertes sin resolver, hay cosas más importantes que tomar parte en mítines electorales en el extranjero», ha declarado. La diputada democristiana Julia Kloeckner ha pedido a los turcos residentes en Alemania que boicoteen el evento, mientras que varias asociaciones civiles ha convocado una concentración de protesta en la que se esperan no menos de diez mil manifestantes.

El ejecutivo de Angela Merkel ha asegurado que Erdogan es bienvenido en Alemania, pero ha pedido un poco de tacto al mandatario turco. «El gobierno alemán espera que el Primer Ministro Erdogan muestre un sentido de la responsabilidad y sensibilidad durante su aparición», declaró su portavoz, Steffen Seibertt.