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ABC Cultural

Sangre y fútbol: los muertos que ETA puso sobre el césped para reventar el Mundial de España

Alberto Ojeda recuerda en 'Cuero contra plomo' la competición de 1982, uno de los peores años de la banda terrorista

Prometieron no atentar contra los equipos, pero no dejaron de matar y secuestrar para reivindicar su causa

Inauguración del Mundial de 1982 (izquierda), junto a la imagen de Alberto Muñagorri, tras perder la pierna por una bomba de ETA ABC
Israel Viana

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El 13 de junio de 1982, mientras se celebraba la ceremonia inaugural del Mundial, José Javier Beloqui y su compañero de ETA José Aparicio Sagastuma pararon un taxi en Rentería a punta de pistola e introdujeron a su chófer en el maletero. ... Sin sacarlo de allí, condujeron hasta el Alto de Capuchinos y estacionaron el vehículo en el punto exacto desde el que podían divisar, varios cientos de metros más abajo, la caseta de control de la Guardia Civil situada en la entrada del puerto de Pasajes.

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