El paso imprescindible para freír pescado en la freidora de aire que casi nadie conoce

Con este truco, podrás preparar deliciosas recetas a la perfección, como la tradicional merluza a la romana en freidora de aire.

La humedad es el gran enemigo de la textura crujiente. Cuando colocamos el pescado directamente en la freidora de aire sin haberlo secado previamente, el exceso de agua en la superficie impide que se forme esa capa dorada tan apetecible. En lugar de freír, el pescado se cuece en su propio vapor, lo que afecta tanto al sabor como a la textura.

Usar papel de cocina para secar el pescado (ya sea fileteado o entero) es un gesto rápido pero fundamental. Al eliminar la humedad superficial, permitimos que el calor circule mejor, que la piel se vuelva crujiente y que el interior se mantenga jugoso. Este paso es especialmente importante si el pescado ha estado congelado o lo hemos lavado justo antes de cocinarlo.

Además de secar bien el pescado, conviene precalentar la freidora de aire durante unos minutos para asegurar una cocción uniforme desde el inicio. Puedes pincelar ligeramente el pescado con aceite de oliva para realzar el dorado y el sabor. Y no olvides usar papel de hornear perforado o una rejilla para evitar que se pegue al fondo.

Otra buena práctica es no sobrecargar la cesta. Deja espacio entre las piezas para que el aire circule bien. Si vas a rebozarlo, opta por un empanado fino o enharinado ligero, y asegúrate de presionar bien para que se adhiera correctamente.

Freír pescado en la freidora de aire permite disfrutar de un resultado crujiente por fuera y jugoso por dentro sin necesidad de bañar el alimento en aceite.

Y ahora, con este sencillo paso previo que te hemos enseñado, mejora notablemente el resultado final: más sabor, mejor textura y menos frustración al despegarlo.

Una solución simple pero muy eficaz para convertir este electrodoméstico en tu mejor aliado en la cocina saludable.

Ahora que lo sabes, la próxima vez que cocines merluza, bacalao, sardinas o cualquier otro pescado en tu air fryer, recuerda: sécalo bien antes de empezar. Tus cenas (y tu freidora) te lo agradecerán.

Además de secar el pescado, existen otros pequeños detalles que pueden marcar la diferencia: dar la vuelta al pescado a mitad de cocción para que se dore por igual, usar marinados ligeros con especias para potenciar el sabor, o ajustar la temperatura según el grosor de la pieza.

Si quieres sacarle todo el partido a tu airfryer, toma nota también de estos consejos que te damos en GURMÉ para cocinar en tu freidora de aire. Y para alargar la vida útil de este electrodoméstico, no te pierdas nuestros trucos para limpiar la freidora de aire.