Las medidas desesperadas de Chiara Ferragni para intentar salvar su imperio
La influencer italiana está viendo como sus empresas se derrumban con pérdidas millonarias en los últimos meses
El escándalo de Chiara Ferragni llega a San Remo: Fedez compite contra sus supuestos amantes por ir a Eurovisión
Chiara Ferragni
Chiara Ferragni (37 años) marcó precedente. La italiana fundamentó las bases de las redes sociales como modelo de negocio construyendo un imperio multimillonario sobre su propia imagen que, en los últimos meses, se está viendo resquebrajado. La polémica por el 'Pandoro Gate' ha derivado ... en que grandes marcas hayan rescindido sus contratos con la 'influencer' tras ser acusada de estafa, algo que repercute directamente en sus ingresos. A esta delicada situación se le suma su reciente separación del rapero italiano Fedez (35) tras cinco años de matrimonio y dos hijos en común. Desde que irrumpió en la vida de millones de personas a través de las pantallas, la joven no ha vivido algo similar. Sin su marido, con cada vez menos contrataciones y sin el apoyo de aquellos que le hicieron saborear las mieles del éxito, la empresaria vive su particular bajada a los infiernos.
A raíz del escándalo 'Pandoro Gate', la compañía que agrupa las marcas de la influencer bajo el nombre de 'Fenice' ha registrado pérdidas millonarias en los últimos meses debido a la pérdida de numerosos contratos publicitarios.
Para intentar salvar esta situación, Chiara se ha reunido con sus socios de Alchimia y esta semana han aprobado una ampliación de capital de 6,4 millones de euros. Tal y como ha informado el diario italiano 'Il Corriere della Sera', el grupo ha deliberado «la reconstrucción social» de la empresa ante la brutal crisis a la que se enfrenta. Sisterhood ha asegurado estar «dispuesta a suscribir el aumento de capital en proporción a la participación poseída», según cuenta el medio anteriormente citado.
Mientras el proceso judicial del caso 'Pandoro Gate' sigue abierto y con su divorcio todavía reciente, la influencer intenta retomar poco a poco su vida pública tras casi dos años de absoluta ausencia y hace unas semanas se sentó en primera fila durante un desfile de la semana de la moda de Milán, también acudió a la de París celebrada el pasado 5 de marzo. Unos pequeños gestos con los que la italiana intenta volver a posicionarse de nuevo entre las jóvenes más influyentes del panorama internacional. Aí, el pasado mes de febrero logró protagonizar la portada de la revista 'Elle' en su versión rumana.
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