Las controvertidas revelaciones de Mavys Álvarez sobre Diego Armando Maradona

Así las cosas, su situación ha cambiado: «No está bien. Se encuentra sobrepasada por la situación y le da cosa hasta salir a la calle por lo que puedan decirle», explica Mario Pentón, de canal 41 de Miami, a ABC.

Aunque hay quien crea que Mavys ya ha explicado todo lo relativo a su relación con Maradona, la realidad es bien distinta. Aún queda mucho por contar . Sigue recibiendo ofertas pero se ha llamado a silencio. Necesita recomponerse. Tan solo ha roto su mutismo para pedir a la Justicia argentina que admita a trámite la denuncia por trata de personas que interpuso una ONG argentina tras escuchar su testimonio. La misma está dirigida al entorno que acompañó a Maradona en sus tiempos más convulsos. A tal efecto, Mavys Rodríguez asegura que cuando reciba la segunda dosis de la vacuna del COVID, tiene intención de viajar a Buenos Aires con un buen puñado de documentos para reforzar su testimonio. Recordemos que era menor de edad cuando viajó de Cuba a Buenos Aires acompañando al futbolista y que este hizo que se sometiera a una operación de aumento de senos.

Estos hechos ocurrieron en el año 2001. En Buenos Aires se celebró un partido homenaje al astro argentino. Se alojó en el Hotel Hilton pero no pagó . Maradona y Guillermo Coppola tenían la costumbre de hacer canjes. Pactaron con los responsables del que estarían una semana y que ocuparían dos habitaciones. En una estaría Guillermo y en la otra el futbolista con Mavys. El régimen de Maradona y su representante era de todo incluido.

Los responsables del hotel, antes de aceptar la propuesta de Coppola, consultaron con Eduardo Gallego, empresario del sector audiovisual y hombre muy bien relacionado. Él aconsejó que aceptaran aunque le tocara convertirse en la sombra de Diego durante sus días en el Hilton.

Lo cierto es que Eduardo todavía no se ha recuperado de lo que vio . Así lo explica a ABC: «Diego estaba fuera de sí . Apenas podía moverse y pronunciaba frases inconexas. Realmente, al verlo, pensamos que debería estar ingresado. No estaba en condiciones de nada ni a nivel físico ni psicológico».

A alguien se le ocurrió regalarle a Diego una Bayesta. Así salió el experimento según Eduardo Gallego: « Destrozó la habitación, las puertas, todo quedó inservible . Pero no solo jugaba con la bayesta, también disparaba con un paintball y llegó a darle a un camarero. Era incontrolable y había tocado fondo ». En cuanto a Mavys, Eduardo Gallego recuerda haberla visto en el hotel: «Es cierto que la vi pero pensé que era la hija de algún amigo de Diego. No vi entre ellos nada que mostrara que eran novios o tuvieran una relación sentimental. Pobre chica, me he quedado helado al escuchar su testimonio».

Un episodio que llamó poderosamente la atención de Eduardo fue el ocurrido en el gimnasio del hotel: «Diego estaba en la cinta y observé que tenía una vía en el brazo. Pregunté al médico que le acompañaba qué le estaba pinchando y me dijo que hormonas. Al día siguiente tenía el partido homenaje y no podía dar un paso». Recuerda el empresario del sector audiovisual que en el equipo del futbolista también se encontraba el famoso doctor Cahe, especializado en tratamiento de las adicciones. Era Cahe el único médico a quien Diego hacía algo de caso. Sin embargo, este hombre, que había ayudado a muchos famosos argentinos a dejar la cocaína, no lo consiguió con el ídolo del balompié.

Ante lo ocurrido en Buenos Aires en 2001, muchos se preguntan qué narices hacía Maradona en Cuba, en la mal llamada clínica de rehabilitación de La Pradera. Eduardo lo tiene claro: «Maradona fue a Cuba a hacer un master en cocaína» . Marío Pentón recuerda que un buen amigo del futbolista le dijo a los máximos dirigentes cubanos: «Como no dejen de darle droga, se les va a morir aquí en la isla». Es triste pero el tiempo demuestra que Diego jamás intentó en serio dejar las drogas. Y, ojo, porque sabía que su corazón no aguantaría tanto exceso.