¿Se porta peor tu hijo este verano? Estas pueden ser las razones
Muchas familias sienten confusión al no saber muy bien lo que es normal y no en el comportamiento de sus hijos
Pese a que las vacaciones suele ser el periodo más ansiado del año, no hay que ocultar que para algunas familias también es una época que se les hace cuesta arriba por todo lo que supone la convivencia "todos juntos las 24 horas del ... día" .
Este verano, especialmente marcado todavía por el Covid-19, no son pocos los padres que al ser preguntados por sus hijos sueltan un profundo «¡Ufff!». ¿Es que se están portando peor estas vacaciones?
Javier Feliz , director de Ita Cirés especialistas en salud mental, considera que hay familias que se muestran muy preocupadas porque observan a sus hijos, sobre todo los cercanos a la adolescencia, que se manifiestan más apáticos, sin ganas de disfrutar del ocio, muy irascibles, que estallan a la mínima y crean una discusión... «No hay que obviar que con todo lo que hemos vivido por la pandemia tanto los hijos como los padres llegan a las vacaciones muy cansados, quizá con esa idea de tener unas semanas idílicas y que finalmente no son tales», explica.
Asegura que la mayoría de los jóvenes han pasado durante el resto del año una media de siete horas diarias conectados a sus móviles, (lo que no entiende este profesional que se considere como un tiempo ya normalizado). «Han estado en lo que ellos creen que son contactos sociales , pero es una falsedad. Además, ahora siguen viendo en sus pantallas lo felices que son los demás y todo lo que tienen sin que nadie les haga entender que lo que están viendo no es real y que, además, hay mucho trabajo detrás de las fotos y vídeos que visualizan. Esa falsa felicidad les hace sentir más lejos de ese mundo idílico. Les perjudica. Además, les aisla y les frustra. Les hace estar de peor humor cuando desconectan de su móvil y miran a su alrededor».
Por otra parte, señala que numerosos padres se preocupan de controlarles el número de horas que están con sus teléfonos y de que lo dejen fuera de la habitación por la noche, pero para nada están al tanto de los contenidos que ven . «Hay muchos niños que con 12 años ya saben lo que son las autolesiones, cómo realizarlas, lo que es la bulimia, la anorexia, el suicidio... y pueden adquirir ciertos comportamientos nada favorables».
Otros jóvenes, sin embargo, optan por intentar recuperar a toda costa el tiempo perdido durante el confinamiento y tiempo de restricciones y solo piensan en salir con sus amigos de fiesta como único objetivo. Cualquier impedimento por parte de los padres les supone un gran enfado y el comienzo de un gran conflicto familiar porque no sportan verse limitados en su diversión.
Añade este especialista que las familias están muy desconcertadas en la actualidad por no saber muy bien lo que es un comportamiento normal o no en sus hijos adolescentes. «Manifiestan mucha confusión». En un intento de ayudarles, asegura que no hay que alarmarse y que son normales ciertos comportamientos debido a la tensión que ha generado en ellos el confinamiento y la pandemia , y a lo que se une una edad crítica en los hijos.
No obstante, recomienda estar atentos a una serie de actitudes que deben observar este verano ya que tienen más ocasiones de estar juntos. Son estas:
-Cambio brusco de rutinas y abandono de hábitos saludables.
-Modificación de pautas de sueño y alimentación (por exceso o por defecto)
-Ruptura con las amistades habituales y aparición de otras nuevas.
-Episodios de falta de respeto e incumplimiento de normas.
-Mentiras frecuentes.
-Consumo de drogas o alcohol.
-Falta de motivación y abandono de sus proyectos.
-Poca comunicación.
Según Javier Feliz «los padres de no deben alarmarse ante alguno de estos cambios porque pueden ser puntuales (como es el hecho de beber un día en una fiesta, o tener un gran enfado en otra ocasión) o motivados por esta apatía por la pandemia». Explica que se trata de una serie de comportamientos que si se repiten de forma continuada y durante más de cinco meses, tal y como señala la guía de consulta de diágnóstico DSM-5 de la Asociación Americana de Psiquiatría, sí se le deben prestar mayor atención. En estos casos, ya no se trata de un mal comportamiento puntual, sino de un posible trastorno de conducta y «lo más adecuado es, en esta situación, acudir a un especialista para salir de dudas y poder solucionar la situación cuanto antes».
Este experto señala además su preocupación ante el inicio del próximo curso, «puesto que muchos alumnos han estado estudiando de manera online y la vuelta a la rutina de las clases presenciales tantas horas no va a ser sencilla».