Karl Lagerfeld juega a ser editor de un periódico

Ayer volvió a asombrar a los franceses con otra de sus genialidades: la ilustración integra el matutino “Libération” con maquillaje de Shu Uemera, demostrando su ojo clínico para captar la realidad con caricaturas estilizadas de los protagonistas del día. La portada del periódico de izquierdas fue toda para el Káiser: “Karl Lagerfeld diseña toda la actualidad del día”, reza la entradilla principal. Con sus manos retrató las noticias que hoy tienen prendados a los franceses: los graves problemas fiscales de Liliane Bettencourt, heredera del imperio L’ Oreal, el futuro de los yacimientos de litio en Afganistán, o una preocupada Angela Merkel frente a su rival electoral, Christian Wulff.

“Si la moda ha dejado el campo de las artes menores para ganar sus títulos de nobleza, es gracias a hombres como Karl Lagerfeld”, comienza diciendo Laurent Joffrin en su editorial de este “Libération” que promete convertirse en un diamante negro para los coleccionistas del mundillo fashion. Algo que Joffrin ya anticipa: “Este número especial, siguiendo con los coleccionables que a Libération le gusta ofrecer a sus lectores, pasará a la historia del periódico”.

En defensa de la prensa

En su rol de redactor jefe, y como no podía ser de otra forma, Lagerfeld elige a Lagerfeld para la apertura de este “Libération” tamaño “grand”. En una entrevista exclusiva con Francoise-Marie Santucci, una de las periodistas más seguidas por la intelectualidad de la Rive Gauche, el creativo de Chanel declara: “Leer es la cosa más lujosa en mi vida”. Y agrega: “Detesto no estar informado (...) Amo el contacto con el diario de papel, qué horror utilizar un objeto electrónico”.

Lagerfeld podía optar por cualquier departamento del periódico y se decidió por el área de diseño e ilustración para realizar su intervención. “Mi gusto por la caricatura viene de las revistas de comienzos del siglo XX que descubrí cuando era un niño”, explica el diseñador, quien siempre se guarda una crítica feroz para los tiempos que corren: “Lo que me lamento de las caricaturas modernas es que están hechas con un especie de enojo, rápidamente, sin un esfuerzo de gran valor gráfico”. Sobre la prensa, el Káiser concluye: “A los diarios les reprocho su corrección política, tanto a los de derecha como a los de izquierda”, pero no deja de invitar a los periodistas a ser más creativos y audaces, algo en lo que él es un maestro desde hace más de 50 años.