Naomi Campbell a los 50 años, los dominios de la «diosa de ébano»

A los 16 años, entre sus primeros trabajos a pesar de la oposición familiar, estuvo una sesión de fotos con Azzedine Alaïa , que se convirtió en su padrino profesional y personal. En los 90 formó parte del grupo más universal de modelos, el formado por Cindy Crawford , Linda Evangelista , Claudia Schiffer , Christy Turlington y Helena Christensen . Desde entonces, Naomi ha probado las mieles del mundo de la música, la actuación y la empresa de hostelería con idénticos y pírricos resultados.

Pero si Naomi ha escogido una causa, esta sería la de evitar el racismo en la pasarela . Ella fue la primera modelo negra en aparecer en 1988 en la portada del «Vogue» francés tras ser rechazada en numerosas ocasiones. A lo largo de su carrera ha tenido que luchar contra el racismo incluso recientemente, cuando, según contaba ella misma, una empresa asiática no deseaba usar sus fotos por su tono de piel.

Otro asunto espinoso para la « diosa de ébano » han sido sus problemas con la justicia. Hace más de 20 años, su asistente personal la denunció por agresión , algo que le volvió a ocurrir con su ama de llaves un par de lustros después. Su temprana adicción a las drogas, sus desaires de diva y el exceso de retoques estéticos a los que se ha sometido han creado ríos de tinta.

Sus últimas excentricidades son una obsesión por la desinfección compulsiva y una cada vez más abultada colección de pelucas que luce día si y día también, pues lleva el pelo al cero. La naturalidad no está entre sus centros de interés ni le preocupa lo más mínimo.

Ahora que ha cumplido 50, Naomi Campbell no necesita trabajar si no es por gusto . Participa ocasionalmente en desfiles y eventos relacionados con el mundo de la moda e incluso ha creado una cuenta de Instagram en la que posa con filtros y maquillaje de envergadura. En ella entrevista a personas de su entorno tan conocidas como Cindy Crawford o Marc Jacobs .

Naomi, que ha estado entre las modelos favoritas de Yves Saint Laurent , Gianni Versace o Karl Lagerfeld , no tiene una sucesora que la iguale. Aunque se siente madrina de modelos de color como la australiana de origen sudanés Adut Akech Bior , quien debutó en la pasarela con Saint Laurent en 2017, ninguna de ellas rivaliza con la modelo londinense en notoriedad ni en belleza. Acercándose a su nivel de otros tiempos estarían las hermanas Hadid o las Kardashian, pues son estas dos sagas las únicas que consiguen contratos multimillonarios, así como todo tipo de privilegios y protagonismos.

Pero ni la carrera de Naomi Campbell está terminada ni ella piensa dejar de trabajar. Y es que, además de que los 50 de ahora no son los de antes y la moda sigue siendo clave entre las mujeres de su generación, esta diva caprichosa y excesiva sabe que sigue teniendo un público amplísimo. Ella que, fue novia de Alberto de Mónaco , The Edge (guitarrista de U2) o de Joaquín Cortés , pionera de la lucha contra el racismo, defensora de la ecología y activista en la protección de los animales, sigue siendo la favorita de muchas marcas y creadores.