Las temibles gemelas Maxwell

Historia de las «memorables» hermanas mayores de la cómplice de Jeffrey Epstein

Robert Maxwell, fotografiado con su esposa Betty (sentada sobre sus rodillas, la más pequeña de la familia, Ghislaine) y siete de sus nueve hijos en su residencia de Headington Hill Hall (Oxford). Sentados junto a su madre, Philip y Anne, los mayores; junto a su padre, de izquierda a derecha, Ian, Isabel (rodeada con un círculo), Kevin y Christine (también marcada). La imagen es de primera mitad de la década de los 60 ABC

María Estévez

18/07/2020
Actualizado 20/07/2020 a las 09:37h.

Dicen que los hijos suelen seguir los pasos de sus padres y que de un personaje turbio germina un criminal. Algo así ha ocurrido en la familia Maxwell . Mientras Ghislaine espera su juicio en una cárcel de Brooklyn, con sábanas y ... pijamas de papel para prevenir un posible «suicidio», cientos de teorías surgen en torno a sus manejos con el difunto Jeffrey Epstein para explotar sexualmente a decenas de menores y, de paso, chantajear a sus poderosos amigos. Muchos creen que, durante los meses en los que Ghislaine ha estado escondida , ha buscado la protección de sus hermanas gemelas Christine e Isabel , de 69 años.

De los nueve hermanos Maxwell, viven siete (Karina y Michael murieron cuando tenían 3 y 15 años, respectivamente). Los mayores, Philip y Anne , no ha sido vistos en público al menos en una década. Pero, las gemelas, la propia Ghislaine y Kevin e Ian recuerdan a los Roy de la exitosa serie «Succession»: herederos de las oscuras ambiciones paternas.

El magnate de los medios Robert Maxwell construyó un imperio editorial y una carrera política en el Reino Unido que se truncó cuando murió repentinamente en 1991, al caer al mar desde su yate, tras saquear los fondos de pensiones de su compañía para cubrir sus deudas . Kevin e Ian, que habían estado trabajando para él, fueron acusados de fraude.

Las gemelas Christine e Isabel, por su parte, se trasladaron a Silicon Valley en los 80 y en 1993 cofundaron Magellan, uno de los primeros motores de búsqueda. Según «The Daily Beast», las hermanas aparecen en el libro de Michael Wolff sobre las primeras startups . Según Wolff, ambas son personajes memorables, aunque Christine es «más dominante que su hermana».

Pelotazo tecnológico

Las gemelas ganaron millones cuando Magellan fue vendida a otra compañía, aunque aquella operación enfrió la relación entre las dos. Desde entonces, ambas hermanas han permanecido en las esferas del mundo del software y la tecnología. Christine es doctora del departamento de Humanidades de la Universidad de Texas, en Dallas, y consultora de compañías de internet. Isabel, por su parte, fue la presidenta de una empresa de correo electrónico israelí llamada Commtouch y ha dado conferencias como «pionera tecnológica del Foro Económico Mundial». Se atribuye la protección de su hermana pequeña , pues se dice que a través de ella, Ghislaine habría vendido información para protegerse.

Retrato de Ghislaine Maxwell durante su comparecencia judicial esta semana REUTERS

Los maridos de las gemelas Maxwell tienen historias realmente extrañas. Christine está casada con Roger Malina , un astrofísico de la Universidad de Texas. Según revela «The Daily Beast», fue socio en California del fundador de la Cienciología, L.Ronald Hubbard , y del ingeniero de cohetes J ack Parsons , los tres ocultistas y transhumanistas (como muchos amigos de Epstein).

La historia romántica de Isabel es aún más complicada. Primero se casó con el hijo de Carl Djerassi , desarrollador de la píldora anticonceptiva. Después, con David Hayden y, por último, con Al Seckel , ilusionista y estafador, quien cofundó un grupo llamado los Escépticos del Sur de California que investigaba la relación de la ciencia con lo paranormal. Seckel e Isabel se mudaron a Francia en 2010, donde vivieron en un castillo y se dedicaron a comprar miles de herramientas de la edad de piedra para vender en EE.UU. Ese mismo año, Seckel organizó una «conferencia científica» en la isla privada de Jeffrey Epstein. Murió en 2015 al caerse por un acantilado cerca de su casa. Como Robert Maxwell, Seckel pasó a mejor vida después de que un artículo de prensa expusiera su pasado fraudulento y sus crecientes deudas.