Los famosos se suben al carro de Hillary

Donald Trump se llevó la luz de todos los focos en una convención republicana desierta de grandes estrellas. No ocurrirá lo mismo con la candidata demócrata

Dami Lovato junto a Hillary Clinton ABC

26/07/2016
Actualizado 25/09/2017 a las 09:44h.

Pese a la popularidad tremenda de Donald Trump en grandes sectores de la población estadounidense, apenas hay famosos que se la jueguen para aparecer en la foto con él. Denostado por los medios serios y ridiculizado por el entretenimiento, Trump no parece en este momento un buen compañero de viaje para ningún actor o cantante ... . Se ha comprobado durante esta semana en la convención del partido republicano. El ya candidato a la presidencia prometió una semana « plagada de estrellas ». La realidad es que la sola estrella fue Trump , y su luz quemaba todo lo que pasaba alrededor. Las únicas caras conocidas en Cleveland, donde se citó el partido republicano, fueron Willie Robertson , uno de los protagonistas del reality Duck Dinasty –programa favorito de la América profunda– y dos actores de segunda fila: Scott Baio y Antonio Sabato Jr.

Los famosos que le faltaron a Trump le van a sobrar a Hillary Clinton en la convención del partido demócrata, que arrancó ayer en Filadelfia . La ex secretaria de Estado es la única opción sensata para muchos, aunque solo sea para frenar a Trump, aunque haya que votar con la nariz tapada. Así que apoyarla, cantar para ella o dar un discurso no son un problema de imagen para los famosos, sino lo contrario.

Votante joven

Entre las celebrities que apoyarán a Clinton se encuentra: Demi Lovato y Eva Longoria

Clinton tratará de sacar tajada de las celebrities: entre quienes subirán al estrado a dar discursos estarán las jóvenes actrices Chloë Grace Moretz –ídolo adolescente desde la película «The Amityville Horror» y novia de Brooklyn Beckham – o Demi Lovato , que forjó su carrera en Disney Channel y ahora triunfa también como cantante. Ambas buscarán acercar a Clinton al votante joven, ese que se fue en masa a su contrincante Bernie Sanders durante las primarias, y que forma una de las grandes grietas del partido demócrata. También colaborarán en este objetivo Lena Dunham –faro de la modernidad juvenil como creadora y protagonista de la serie «Girls»– y America Ferrera , que protagonizó la versión estadounidense de «Betty la fea» y que servirá como guiño al votante hispano, quizá el que más teme a Trump.

Más veteranas son Eva Longo ria y Debra Messing , esta última una seguidora ferviente de Clinton y que ha llevado su lucha a las redes sociales, con ataques a los seguidores de Sanders que se niegan a cerrar filas con la ganadora de las primarias. Ambas estarán en Filadelfia, adonde también acudirán estrellas de la música, con actuaciones organizadas alrededor de la convención. Idina Menzel , una de las cantantes más famosas de Broadway, compartirá escenario hoy con Cyndi Lauper en un almuerzo dedicado a las mujeres. Fergi e, la cantante de Black Eyed Peas, comandará un concierto benéfico el día 27. Y en la fiesta de clausura están anunciados, entre otros, Snoop Dogg , Lenny Kravitz y Lady Gaga , que apoyó a Clinton desde el comienzo de su carrera presidencial. También está previsto que Katy Perry haga una aparición en Filadelfia.

Bernie Sanders , el contrincante de Clinton durante las primarias, también ha traído famosos bajo su ala, aunque con pocas ganas de sumar apoyos para la candidata demócrata. Los actores Susan Sarandon y Danny Glover participaron el domingo en una protesta en un parque al norte de Filadelfia, en el que animaron a los seguidores del senador de Vermont a continuar la «revolución política» contra el establishment que representa Clinton.

Muchos otros famosos, y de más rango, de esos que organizan actos benéficos que suman millones de dólares a las campañas electorales, han dado su apoyo a Clinton durante el último año de campaña. George Clooney, Leonardo DiCaprio, Ellen DeGeneres, Steven Spielberg, Anna Wintour o Amy Schumer son algunos ejemplos. Ninguno de ellos ha confirmado de momento su presencia en Filadelfia, pero no extrañaría que algunos fueran cartas que la favorita demócrata se guarda bajo la manga.