Carmen Lomana le come el terreno a Naty Abascal

Carmen Lomana es tres años más joven y por un motivo nunca aclarado —un novio en disputa, según dicen— muchos la consideran la archienemiga de Naty, a quién tenía vetada en «¡Hola!», su casa. Pero esta censura se rompió hace solo unas semanas, cuando el prestigioso semanario publicó un extenso reportaje de la Lomana. ¿Por qué?

Evidentemente, no juegan en la misma liga. Según Personality Media, una empresa de Consultoría de Marketing especializada en el análisis de personajes públicos, Lomana es conocida por el 76% del público mientras que el reconocimiento que Naty recibe del público es solo del 65%.

«Estoy viajando, ahora voy al Caribe y de allí a Bali», suele ser una de las respuestas de Naty. Aunque en otros tiempos ha colaborado con firmas como Mango y Pronovias, lo cierto es que hoy su cuartel de operaciones sigue siendo la revista donde tantas veces han posado tanto ella como sus hijos Rafael y Luis Medina . Sin embargo, fuentes cercanas a la revista deslizan a ABC que «se comenta que ha perdido poder e incluso se especula con que le queda poco tiempo en la compañía. De hecho los últimos reportajes que ha firmado datan de hace varios meses».

Algunos apuntan a otra rivalidad, también con una mujer. Se trata de la italiana Nana Bottazzi, responsable de las producciones de moda más espectaculares de la revista. Bottazzi está muy bien conectada con la aristocracia y los grandes de la moda italiana y, dicen, Naty no lleva bien eso. Pero no teman por la sevillana que aún «mantiene su poderío» en «¡Hola! Fashion» pese a que hay quien comente que se tambalee su trono. Como prueba, citan el amplio reportaje que hace solamente un par de semanas su revista de cabecera dedicó a Lomana, su enemiga pública número uno, aunque ninguna de las dos quiera hoy polemizar.

A Naty es imposible sacarle una palabra de Carmen ya que lo suyo es ignorar y pasar de ese tema. Lomana es más locuaz y sí recuerda cómo hace años le compraba muchos vestidos de Oscar de la Renta que Naty traía a España mucho antes de que el diseñador dominicano abriera una tienda en Madrid. Después han sido muchas las veces en las que se ha comentado que donde iba una no podía ir la otra, aunque siempre quedan lugares neutrales a los que acuden las dos sin necesidad de coincidir. Es en dichas citas donde se ve que no se saludan, ni con besos en las mejillas, ni con un gesto con la mano.

Si en su día fueron conocidas de Madrid, hoy prefieren evitarse con golpe de melena incluido. De ahí que la presencia de Lomana en las páginas de «¡Hola!» haya alertado sobre la situación de una Naty que sigue contando con el apoyo de los más veteranos de la casa. Amiga incondicional de Cari Lapique o Maribel Yébenes, el círculo de Naty se ha ido estrechando quedándose únicamente con los íntimos.

¿Ha llegado el fin del reinado de Naty Abascal? Habrá que esperar a los próximos números de «¡Hola!» para averiguarlo