Francis Montesinos, de la Aguja de Oro de la Moda a la presunción de inocencia

El modista valenciano se considera «inocente», y su círculo íntimo lo defiende en ABC

Francis Montesinos, de la Aguja de Oro de la Moda a la presunción de inocencia JOSÉ LUIS ÁLVAREZ

angie calero

«Como madre de modelo de una niña que trabaja con Francis tengo confianza absoluta en él». Así de firme se mostraba Cristina de Salazar el pasado miércoles cuando la ciudad de Valencia conocía las acusaciones que se cernían sobre Francis Montesinos (63) que ... hablaban de un posible abuso sexual por parte del modisto a dos menores. «A Francis no le llaman los niños ni para jugar. Es absurdo», sentenciaba. El entorno cercano al artista asegura que Montesinos «está en casa muy deprimido y sin ganas de hablar ». El jueves por la tarde en una rueda de prensa el propio diseñador apostilló que todo se basaba « en infundios falsos y erróneos ». Hasta en cuatro ocasiones aseguraba que es «inocente».

Han transcurrido 42 años desde que el diseñador abriese su primera tienda en la plaza del Tossal, en pleno barrio de El Carmen. En un local entre la calle baja y alta montó su primer taller. Cuatro pisos más arriba, Montesinos tenía su despacho. Desde su pequeño escondite en una de las zonas más emblemáticas de la ciudad, el artista mostraba al mundo sus creaciones. Estampados llamativos que nada tenían que envidiar a los de Christian Lacroix. Patrones transgresores, repletos de movimiento, brillos y volantes, le harían llegar a los 80 siendo un creador de vanguardia.

De Valencia a La Movida

Después de su debut en el Ritz de Barcelona, decidió desplazarse a Madrid. Eran los años de La Movida y la capital vivía su máximo esplendor. Allí desfiló en el Palacio de Cristal y el Palace. Pero sería ante 15.000 personas en la Plaza de Toros de las Ventas donde crearía escuela con un homenaje a Picasso, Camarón y, por supuesto, a Sorolla. «Nunca hubo tanto arte sobre la arena», así describió «Woman Week Daily» el desfile del valenciano. Pedro Almodóvar (64), Bibí Andersen (60) o Paola Dominguín (53) fueron los primeros en lucir sus diseños. Así nació el «Fenómeno Montesinos» que le haría dar a conocer sus tendencias en ciudades como París o Berlín. En 1985, con solo 36 años, Montesinos se convirtió en el primer diseñador español premiado con la Aguja de Oro de la Moda. Diez años después diseñaría el vestuario para el estreno mundial de «El Lago de los Cisnes» del Ballet Nacional de Cuba, por el que obtuvo un premio al mejor vestuario. Su mayor distinción llegó en octubre de 2006 de la mano del Rey Juan Carlos I, que le entregó la Medalla de oro al Mérito de las Bellas Artes. El broche de oro a su carrera profesional. Aquel que reconocía su modernidad y proyección de la imagen de España en el exterior.

Su entorno más cercano no ha dudado en salir en su defensa tras las acusaciones. Hablan de venganza: «Suena a encerrona por algo. Me da mucha rabia que a alguien con una creatividad como la de Francis le intenten hundir». En caso de que fuera así, cabe recordar el final del caso «Arny», que se produjo en Sevilla en 1995. En el sumario del juicio por las actividades de prostitución de menores que se llevaron a cabo en el ya desaparecido bar Arny, se imputó a 49 hombres. Entre ellos a varios personajes públicos como Jesús Vázquez (48), Javier Gurruchaga (56) o Jorge Cadaval (53), entre otros. Después de cinco meses en los que la vista oral del juicio se aplazó en varias ocasiones, finalmente los menores se fueron retractando. Todos los famosos fueron absueltos. El 19 de marzo de 1998, Jorge Cadaval lamentaba que muchos medios le acusaran «sin pararse a pensar si era cierto». Su compañero Jesús Vázquez facturó un 10 por ciento de lo previsto aquella época y aseguraba que el daño moral era «irreparable».

La musa del artista, Paola Dominguín, no ha querido hablar sobre los cargos que se le imputan a Montesinos. Sin embargo, Josep Lozano (66), amigo íntimo del modisto, habla convencido de un malentendido. «Confiamos en la presunción de inocencia», señala para añadir: «Como la mayoría de la sociedad valenciana, yo también me pregunto por qué se le acusa de algo así». El carácter mediterráneo y el folklore típico de la ciudad del Turia hacen de Montesinos una persona cercana. Le gusta agradar a la gente. «Es padrino de dos chicos con retraso mental y toda la vida les ha ayudado. Me cuesta creer que no sea buena persona», sentencia otra valenciana sorprendida.

Francis Montesinos, de la Aguja de Oro de la Moda a la presunción de inocencia

Artículo solo para suscriptores

Accede sin límites al mejor periodismo

Tres meses 1 Al mes Sin permanencia Suscribirme ahora
Opción recomendada Un año al 50% Ahorra 60€ Descuento anual Suscribirme ahora

Ver comentarios