El parlamento británico a Isabel II: «Gaste menos, ingrese más, y arregle los palacios»

La Casa Real tuvo que recurrir a esta menguante tesorería para hacer frente a un déficit de 2,8 millones de euros en el año 2012-2013. Los ingresos de Isabel II fueron entonces de 31 millones de libras, frente a 33,3 millones incurridos en gasto, un desfase en las cuentas del 7%. «La verdad es que el Palacio vive de forma precaria desde hace un tiempo», advirtió este lunes Margaret Hodge, la influyente presidenta de la comisión parlamentaria responsable del control del gasto público.

Los diputados critican que el gasto de la Casa Real haya bajado solo un 5%Los diputados echan en cara a los responsables de las finanzas de la Reina que solo se hayan apretado el cinturón en un 5% en los últimos cinco años, cuando muchos ministerios han reducido el gasto en un 30%. Además, critican que el personal de la administración de la Casa Real haya permanecido estable en torno a las 430 personas en los últimos siete años, frente a las fuertes reducciones de empleados públicos en otras áreas.

«Tenemos la impresión de que no han intentado lograr mayores ahorros», dijo Hodge. Una de las medidas que recomiendan a la Casa Real es sacar un mayor partido financiero al patrimonio real, en especial al Palacio de Buckingham, que sirvió de escenario para un concierto de Madness durante el 60 aniversario en el trono de Isabel II. Desde 1993, la residencia en Londres de la Reina se abre al público dos meses en verano.

Pero los parlamentarios destacan que recibe solo unas 500.000 visitas anuales, frente a los dos millones de turistas que entran en la Torre de Londres. «La Reina no está allí la mayor parte del tiempo y me cuestra creer que no puedan abrir el palacio al público más días», les recrimina Hodge, diputada laborista. Isabel II pasa la mayor parte del tiempo en Windsor, y se traslada en verano a su residencia escocesa en Balmoral.

Además, el informe parlamentario ha destapado el estado «ruinoso» de algunas de las 360 residencias y edificios que conforman el llamado Palacio Real. Los diputados estiman que en 2012 el 39% de sus dependencias estaban en un estado de mantenimiento «por debajo del objetivo». «Ahora, es probable que la situación haya empeorado, con algunas propiedades en condiciones peligrosas o en deterioro», aseguraba Hodge ayer. Se calcula que serán necesarios unos 60 millones de euros para restaurarlos.

La Reina «no ha estado bien asistida por la Casa Real y por el departamento del Tesoro... en mantener el equilibrio de las cuentas y en la preservación del patrimonio histórico», concluye el informe parlamentario [puedes leerlo aquí en su integridad]. «La administración de la Casa Real debe tomar las riendas a cómo planea hacer frente a este retraso en el mantenimiento; ni siquiera ha realizado una estimación del coste necesario para devolver el patrimonio a una condición aceptable, y el Tesoro no les ha exigido esa estimación tampoco», critica el informe.

Así, el Mausoleo de Victoria y Alberto en Frogmore House, junto a Windsor, requiere una renovación desde hace 18 años. El sistema de calefacción de Buckingham tiene más de 60 años, y genera unas facturas anuales de electricidad y gas de unos 930.000 euros. La instalación eléctrica y mecánica no se ha cambiado desde 1949, y las habitaciones de Estado, que albergan a dignatarios y miembros de familias reales, no se han renovado desde 1952. En ocasiones, los empleados de Buckingham deben emplear cubos para cubrir goteras en la galería de cuadros del palacio.

En abril de 2012 se modificó el sistema de financiación de la Casa Real. Desde entonces, distintas partidas de los Presupuestos Generales han sido sustituidas por la llamada subvención soberana, financiada con el 15% de los beneficios generados por el Patrimonio de la Corona (Crown Estate). Este consiste en un portafolio de propiedades inmobiliarias, edificios y propiedades rústicas de 8.000 millones de libras (casi 10.000 millones de euros) que es gestionado de forma independiente y que alimenta las arcas del Tesoro, y no de la Reina.

El cambio «ha generado un sistema más transparente y vigilado», destacan desde la Casa Real. El presupuesto disponible aumentó un 16% el año pasado con respecto al curso anterior, y se destina a sufragar los gastos derivados de la actividad oficial de Isabel II y su familia, el sueldo de los empleados y el mantenimiento de las propiedades, entre otras cosas. La subvención real para 2014-2015 será de 37,9 millones de libras (46 millones de euros), y la mayor parte del incremento será utilizada para realizar arreglos en el patrimonio.

Desde la Casa Real destacan que, en términos reales, han perdido un 60% de capacidad presupuestaria en los últimos 20 años, según recoge el «Daily Mail». Y sacan pecho con el notable incremento en la obtención de ingresos propios. Así, en 2012-2013, el último curso auditado, obtuvieron unos ingresos de 11,6 millones de libras (14 millones de euros), frente a ocho millones en 2007-2008.

En esta partida se incluye, por ejemplo, el alquiler de estancias de palacios reales para la realización de eventos privados y corporativos, que permitió obtener ocho millones de libras (9,6 millones de euros) el año pasado. El pasado 30 de octubre, por ejemplo, el Palacio de Buckingham albergó una fiesta auspiciada por el banco JP Morgan con el duque de York como anfitrión, y a la que asistieron Tony Blair o Henry Kissinger, entre otros invitados. La portada del «Daily Mail» de este martes le animaba a continuar esta senda: «Alquile su palacio, Señora».