Dormir con el pelo mojado, secarlo al aire libre y frotarlo con la toalla: los errores que cometes con tu melena

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Araceli Nicolás

Helena Rodero explica que es un pecado capilar, porque «el acondicionador es el cosmético que previene el daño capilar, y para prevenirlo hay que utilizarlo en todos los lavados». El acondicionador no es lo mismo que la mascarilla, y aunque muchos profesionales recomiendan usar esta última por la hidratación y nutrición que aporta al cabello, Helena Rodero nos cuenta que «el acondicionador tiene efecto inmediato, y trabaja muy bien a nivel de suavidad, aporta brillo instantáneo, y ayuda a quitar la electricidad estática. Si utilizamos mascarilla en lugar de acondicionador, no estamos consiguiendo todas estos beneficios, porque la mascarilla necesita 10 minutos para actuar y nadie está 10 minutos dentro de la ducha».

Muchas mujeres evitan el secador, bien porque creen que es malo, bien porque les gusta esa sensación de frescor que proporciona el cabello mojado, sobre todo en verano. Sin embargo, para Helena Rodero es uno de los pecados capilares que cometemos. «Cuando el cabello está mojado es más débil porque la cutícula está más abierta y hay enlaces de dentro de la fibra que se deshacen, y entonces más expuesto a que se pueda dañar. Si tú mantienes el cabello mucho tiempo mojado lo que provocas es que tengas más probabilidades de que se dañe». El consejo de la experta es secarlo, pero secarlo adecuadamente. «En mi libro ('Todo sobre tu pelo y tu piel') cuento cómo es la técnica correcta, pero en líneas generales se trata de mantener el secador siempre a favor de la cutícula, mirando hacia las puntas para cerrar la cutícula y sacar rápidamente la humedad, sin pegarlo al cabello, manteniendo al menos una distancia de 10-15 centímetros y a temperatura media».

Otro error que quizás cometas es dormir con el pelo mojado, si eres de las que prefieres lavarlo por la noche. «Dormir con el pelo mojado primero, puede desencadenar o empeorar una dermatitis seborreica por la humedad que se mantiene en el cuero cabelludo, además, puede provocar que salgan hongos en la nuca y en la espalda. Por otro lado, al mantenerse el pelo mojado durante la noche, y mover la cabeza en la cama, mientras dormimos, el cabello se rompe, porque, como hems comentado, el cabello mojado es más delicado», sentencia Helena Rodero.

Los peinados tirantes, tan de moda últimamente, «provocan alopecia por tracción, y a la larga, hacen que la línea de nacimiento del pelo en la cabeza, se vaya retrayendo hacia atrás», señala la farmacéutica. Se pueden llevar peinados tirantes, como una coleta o un recogido, en momentos puntuales, pero después hay que darle un descanso al cabello, soltándolo y dejándolo suelto.

Otro pecado capilar para Helena Rodero es frotar el pelo con la toalla después del lavado. ¿Cómo debes hacerlo entonces? «Cuando frotamos levantamos la cutícula y esto encrespa el cabello. Mi consejo es usar una toalla que absorba bien la humedad, dividir el pelo en dos mechones al salir de la ducha, y pasar la toalla de arriba a abajo, apretando pero sin estirar. Luego, puedes envolver el cabello en una toalla, pero nunca retorciéndolo. El cabello mojado, como hemos dicho, es más débil y si lo retuerces con la toalla, estás rompiendo la fibra».

A estas alturas ya nos ha quedado claro que el cabello mojado es muy débil, así que tampoco conviene desenredarlo, pegando tirones. Helena Rodero aconseja «desenredarlo en seco, antes del lavado, exceptuando el cabello afro que es mucho más delicado. Luego, con la técnica adecuada de lavado (frotando solo el cuero cabelludo), no se vuelve a enredar, y cuando lo tengas que peinar para secarlo, no estará enredado, por lo que lo único que haces es peinarlo, no desenredarlo».

El último error es abusar de la plancha, pero ¿qué es abusar?, según la farmacéutica experta. «Abusar de la plancha significa que la utilices habitualmente, no hay un número de veces concreto a la semana. Depende de tu caso, porque hay mujeres que tienen el cabello muy grueso, que resiste más una plancha, y hay mujeres que tienen el cabello fino y encima decolorado, entonces no resiste nunca la plancha, y lo que se consigue es romperlo por las puntas. Si quieres tener el cabello brillante y bonito, evitar que se parta, que no se enrede, que esté suave.. no debes usar la plancha nunca, exceptuando momentos puntuales. Hay que pensar que la plancha supone siempre un daño acumulativo, porque la queratina es esa, no se regenera, es un daño sobre otro daño, no es como la piel que se puede recuperar en parte. Además, la plancha se utiliza mal, porque hay que usarla sobre cabello seco al 100% y con un protector de calor siempre».