Por qué ahora todas quieren ser morenas

A raíz de esta cuestión surge el interrogante acerca de cuál será el tono que más se pedirá en las peluquerías. Una respuesta fácil de responder si se observan los últimos cambios de looks de celebrities que han optado por eliminar sus balayage o sus baby lights para crear un color más homogéneo en castaño o chocolate. A esto habría que sumarle el auge de ciertos personajes televisivos como Lily Collins en ‘Emily in Paris’ o Úrsula Corberó en ‘La Casa de Papel’, quienes lucen orgullosas estas tonalidades.

Otro de los factores que están popularizando los tonos castaños con respecto a los rubios es la comodidad para mantenerlo intacto y la facilidad para que el color se vea luminoso siempre y cuando se adopte un tratamiento adecuado. En general, el moreno es un tono mucho más agradecido que los rubios, que tienden a degradarse y perder fuerza y matices con la luz del sol o el uso de las planchas y el secador.

A modo de metáfora, podría decirse que desde que comenzase la pandemia en el mundo de la moda se aboga por un estilo más relajado que ha contribuido al auge de las prendas deportivas; y siguiendo esta misma línea algo parecido ha sucedido con el universo beauty, donde se ha popularizado la belleza natural que requiera pocos cuidados.

Para conocer en profundidad las claves de estos colores, Eduardo Sánchez, director de Maison Eduardo Sánchez , explica que en su salón de belleza uno de los tonos más demandados es el ‘Expensive Brunette’ , que llega para «trasladar el lujo al cabello con un color multitono profundo y de bajo mantenimiento, muy juvenil y favorecedor». Según cuenta, se trata de un tono perfecto para estos meses más fríos porque proporciona mucha luminosidad al rostro. «Ese efecto como de cabello tocado por el sol compensa la ausencia de bronceado en la piel».

Sin embargo, antes de decantarse por uno de estos colores conviene analizar el tono de piel para que los rasgos no se vean demasiado endurecidos. En el caso de las pieles más oscuras aconseja recurrir a este color de medios a puntas y no desde la raíz, para lograr un efecto de piel saludable.

«Es el tono perfecto para mujeres cuyo color de base es el castaño claro o rubio oscuro y favorece mucho a todas las morenas que quieran lucir un color más claro sin un gran compromiso y evitando un efecto raíz muy marcado. Funciona tanto para castañas que quieran dar un aspecto más claro a su cabello como para rubias que quieran darle más profundidad y calidez a su melena», añade el estilista y puntualiza que es muy importante mantener los reflejos y la luminosidad del color en casa cuidando mucho la hidratación del cabello mediante el uso de acondicionadores o mascarillas repigmentantes.

Por su parte, desde Llongueras proponen otro matiz para las morenas que, desde su punto de vista, será otro de los grandes éxitos de cara al 2022. Se trata del ‘Olive Brown’, donde los castaños oscuros y marrones llegan a obtener un sutil color verde oliva en su tonalidad más oscura. «Se trata de un tono frío que aporta elegancia y tendencia al cabello. El color completo se trabaja con diferentes alturas de tono, tanto en raíces como al pasar a puntas, con un plus de claridad para dar relieve al color, creando degradados naturales y diseños en tendencia», concluyen.