Un fin de semana imperial en Toledo

Una ciudad repleta de historia y magia

Un fin de semana imperial en Toledo toledo monumental

alex ortiz

Una ciudad flotando bajos las aguas del río Tajo, presidida por el majestuoso Alcázar y su gótica Catedral, encargadas de vigilar la ciudad que no hace tanto tiempo fue la capital de España, y uno de los lugares que pese a los siglos aún se ... sigue respirando ese aroma de diversidad cultural, único en España.

No hay nada mejor que después de una semana llena de agobios, hacer una escapada a la llamada «Ciudad Imperial» para pasar un buen fin de semana. Para empezar, os recomiendo que cuando lleguéis el viernes, os vayáis al barrio de Santa Teresa, en este lugar os podéis encontrar con numerosos bares, donde poder ir en compañía de vuestra pareja, amigos o familia, y tapear hasta altas horas de la noche. En especial, os recomiendo el Bar Tennessee (Plaza de Cuba, 9), un pub con dos plantas, muy económico, con buena música y gran ambiente.

Toledo registra el mejor marzo turístico de los últimos diez años

Al día siguiente, es obligatorio subir al casco histórico de la ciudad y hacer un poco de turismo en una de las ciudades más bonitas de España. Para ello, os recomiendo que compréis la «Pulsera Turística» que Toledo Monumental ofrece para poder visitar y disfrutar de seis de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, además con la compra de la pulsera te ayudará para ahorrar, ya que su precio es de tan solo 8 euros mientras que la entrada única supone 2,50 euros a cada monumento.

Para comer o cenar por la zona antigua de Toledo os recomiendo dos lugares: El primero es «La Abadía» (Plaza de San Nicolás, 3) un buen sitio para comer con mucha variedad a base de «sartenes», tapas o «pulgas» en un peculiar entorno, ya que se encuentra ubicada en una Casa de Oficios del Siglo XVI. El segundo restaurante se llama «El Trébol» (Calle Santa Fe, 1) esta mítica cervecería en el que se encuentran tramos de la antigua muralla islámica, representa el carácter histórico y la mentalidad creativa e innovadora de la ciudad, es un delito irte de Toledo sin probar sus particulares «bombas» (bolas de patata rellenas de carne picada).

Para terminar la noche, podemos disfrutar de un buen concierto en el Círculo de Arte de Toledo (Plaza de San Vicente, 2) donde han tocado artistas de la talla de Supersubmarina, Antonio Orozco o Quique González, entre otros.

Una postal digna de enmarcar

Antes de marcharnos de la ciudad, no nos podemos ir sin ver las vistas de Toledo desde uno de los lugares más maravillosos que tiene la «Ciudad Imperial», en lo que coloquialmente se conoce como «El Valle».

Curiosamente, la mejor manera de ver Toledo es saliendo de la ciudad. La Carretera de Circunvalación, o Ronda del Valle, ofrece las mejores perspectivas de una de las ciudades más bellas de España. Desde el mirador de la ermita de la Virgen del Valle, permite apreciar detalles que a veces se pierden en el entramado de callejones, iglesias y casas nobles del casco histórico. El resultado es una postal digna de enmarcar.

Un fin de semana imperial en Toledo

Artículo solo para suscriptores

Accede sin límites al mejor periodismo

Tres meses 1 Al mes Sin permanencia Suscribirme ahora
Opción recomendada Un año al 50% Ahorra 60€ Descuento anual Suscribirme ahora

Ver comentarios