Sánchez renuncia a defender al Estado en la comisión Pegasus

Esquiva la cita con eurodiputados para explicar los pinchazos en su teléfono móvil

El Gobierno se pone de perfil en las investigaciones de la Eurocámara

Sánchez ayer en Sagunto (Valencia) EP

Corresponsal en Bruselas

18/03/2023
Actualizado a las 05:24h.

El secretario de Estado para la Unión Europea será el únicorepresentante del Gobierno español que comparecerá ante la misión de investigación del Parlamento Europeo sobre las escuchas telefónicas, la conocida como Pegasus por el nombre del famoso software de espionaje ... de las comunicaciones, que visitará Madrid el lunes y el martes. Aunque Pedro Sánchez reconoció públicamente haber sido víctima de estas escuchas, no ha querido reunirse con los eurodiputados ni ha considerado necesario que lo haga ninguno de sus ministros que también fueron espiados. En cambio, los enviados del Parlamento Europeo sí que se reunirán y escucharán las quejas de una larga lista de representantes del secesionismo catalán, empezando por el propio presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que se trasladará a Madrid expresamente para esta ocasión. Y ello a pesar de que un sólido informe encargado por el eurodiputado de Ciudadanos (CS) Jordi Cañas demuestra que las acusaciones que han denunciado desde la Generalitat están basadas en un montaje.

El hecho de que sean los secesionistas los que han dirigido desde Barcelona en todo momento este trámite podría explicar que a la hora de hacer la agenda en Bruselas nadie haya tenido en cuenta ni siquiera que el lunes es un día festivo en Madrid. Después ha sobrevenido la moción de censura promovida por Vox en el Congreso de los Diputados que, aunque era un elemento inesperado, ha sido menos engorroso porque se mantienen reuniones con la Comisión de Defensa.

Pero lo más relevante es que en la última versión del programa de la visita, cerrada ayer viernes, ya ha desaparecido completamente la posibilidad de que comparezcan Sánchez y sus ministros de Defensa, Margarita Robles; del Interior, Fernando Grande-Marlaska; y de Agricultura, Luis Planas, que reconocieron haber sido objeto de las escuchas. Los eurodiputados habían solicitado su comparecencia «como víctimas» y la del también ministro Félix Bolaños como responsable de las comunicaciones de la Presidencia. Finalmente el Gobierno enviará a un funcionario que en este caso se puede considerar de segunda línea, el secretario de Estado de Asuntos Europeos, Pascual Navarro, que es el responsable de gestionar la agenda de las relaciones con el Parlamento Europeo, sin ninguna responsabilidad en el campo del que se va a hablar en esta misión de investigación.

Tampoco ha querido participar la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ni el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, que estará representado por el responsable del área de Justicia, Andrés Jiménez.

El eurodiputado popular Juan Ignacio Zoido lamenta que el Gobierno socialista haya renunciado «a defender que España es un país donde funciona el Estado de derecho», lo que desembocará a su juicio en un informe final en el que se pondrá al país a la misma altura que Hungría y Polonia, cuyos Ejecutivos también han rechazado dar explicaciones ante el Parlamento Europeo por el uso irregular de esta tecnología para controlar a opositores políticos y periodistas.

Jordi Cañas, miembro del Parlamento Europeo por Ciudadanos, cree que, tal como han quedado las cosas, «se cumplirá el objetivo de los promotores de esta investigación y que era poder decir que el Gobierno español no ha colaborado para poder reforzar esa imagen de España que es la caricatura que explotan los secesionistas».

Denuncias desde Barcelona

En 2020, el eurodiputado secesionista Jordi Solé acudió a Citizen Lab para que investigase supuestas escuchas a los dirigentes políticos catalanes. El resultado fue un dictamen que daba por espiados a unos sesenta teléfonos por autores «con una fuerte vinculación con el Gobierno español».

Pedro Sánchez afirma haber sido espiado

En mayo del mismo año, una vez conocidas las denuncias desde la Generalitat, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, anunció por su parte que el presidente del Gobierno también ha sido espiado, así como tres de sus ministros, incluyendo los de Interior y Defensa. Es el único caso de un presidente del Gobierno que denuncia haber sido objeto de escuchas y que además luego no ha querido averiguar activamente quién es el responsable. Se ha considerado en distintos medios que fue una operación gestionada desde Marruecos, pero tampoco ha sido confirmado.

Misión de investigación

Incluir a España en la investigación ha sido siempre el objetivo del secesionismo, razón por la que sus representantes han intentado que los eurodiputados viajasen también a Barcelona. Al final se trasladarán ellos a Madrid la próxima semana, lo que prueba que este trámite les interesa mucho. Por el contrario, el desinterés del Gobierno de Pedro Sánchez se demuestra por el hecho de que ningún alto responsable va a comparecer.

En efecto, tanto Aragonès como la consejera de Exteriores del Gobierno catalán, Meritxell Serret, el concejal del Ayuntamiento de Barcelona Ernest Maragall o toda la comisión de investigación formada en el Parlamento de Cataluña se trasladarán a Madrid para comparecer como «víctimas» de lo que se llegó a bautizar como 'Catalangate' para señalar al Gobierno y al Estado como responsables de estos supuestos abusos.

Un reciente informe realizado por el profesor José Javier Olivas ha demostrado que las bases del 'Catalangate' han sido manipuladas deliberadamente por el Citizen Lab, de la Universidad de Toronto (Canadá), y existen indicios que prueban que esa información ha llegado también a conocimiento del propio Gobierno, lo que no ha convencido a Pedro Sánchez de que habría sido mejor salir a defender a la institución que representa.

El informe final de la comisión de investigación va a ser votado poco antes de que España inicie la presidencia semestral de la UE, lo que se añadirá probablemente a otro informe de la Comisión Europea en el que se señalará previsiblemente lagunas en el respeto al Estado de derecho en españa. Todo ello pa a pesar en la gestión de la presidencia europea.