Sánchez ocultó la condición judicial de su mujer en su carta y en las intervenciones posteriores

En una de ellas, el 30 de abril en la Cadena Ser, aseguraba no conocer los cargos, si es que los había, que se le imputaban a su mujer. «Me tendrán que decir de qué se le acusa», respondía, a pesar de que desde ocho días antes sabía los dos presuntos delitos por los que el juez le había comunicado su condición de investigada. «De tráfico de influencias», informaba la periodista, a lo que Sánchez expuso su supuesto desconocimiento. «¿En base a qué? A información no contrastada como ha dicho ayer el juez del caso Koldo de la Audiencia Nacional, que dice que no tiene que ser llamada ni como testigo. Es que fíjese la perversión del debate en el que estamos, en el que yo tengo que responder ante acusaciones que no están probadas», señaló.

(Declaraciones a partir del minuto 14.30)

Semanas más tarde, Alberto Núñez Feijóo también le cuestionó durante el pleno en el que Sánchez compareció para dar explicaciones sobre la actividad de Begoña Gómez y otros asuntos. «¿Le consta que su mujer está siendo investigada en un juzgado de Madrid?», cuestionó el líder del PP hasta en dos ocasiones distintas y en ambas obtuvo la misma respuesta. Un silencio con el que Sánchez buscaba mantener oculta la verdad que ya conocía desde el 22 de abril, dos días antes de que enviara la carta a los españoles.

«Pedro Sánchez lleva mintiendo a los españoles mes y medio. El 24 de abril, cuando se dirigió a los españoles a través de la famosa carta hablando de persecuciones, no estábamos solo ante una maniobra de distracción ante unas elecciones autonómicas. Ese día, él sabía perfectamente que (su mujer) ya tenía la condición de investigada por tráfico de influencias y corrupción. No solo lo sabía, sino que ese día, al mismo tiempo que envía esa carta a los españoles, generando una crisis institucional sin precedentes, en ese mismo momento en el que hablaba de una persecución judicial, mediática y política a él y su Gobierno, se estaba designando abogado y procurador porque se conocía perfectamente la condición de investigada de su esposa», señaló este martes Cuca Gamarra, secretaria general del PP, que acusó al presidente de haber «utilizado a la Fiscalía como abogado de oficio de su familia».

Para los populares, «Sánchez ha utilizado a todos los españoles en una estrategia que solo buscaba ocultar la verdad y situarse como una víctima» y se ha dedicado a«crear todo tipo de cortinas de humo y crisis institucionales internas y externas con el único objetivo protegerse a toda costa de la corrupción que le acecha». Gamarra cree que «en cualquier democracia, un asunto de estas características haría caer al Gobierno, pero Pedro Sánchez lo que hace es enrocarse y enrocarse más. Permanecer en La Moncloa al precio que sea. Cada vez la corrupción ahoga más a Pedro Sánchez. Él cree que puede resistir, pero es muy difícil que resista», expuso la popular, quien también se refirió a la investigación que está llevando a cabo la Fiscalía Europea.

«¿Será también la Fiscalía Europea víctima de los ataques del presidente del Gobierno? A Bruselas llegarán entre otras documentaciones las cartas de recomendación firmadas por la propia mujer del presidente del Gobierno en concursos públicos que tenía que resolver el Gobierno de España que preside su marido», denunció.