Rajoy desmiente a Sánchez y le recuerda que apoyó el 155 sin cuestionar la vía judicial

«A mí Sánchez no me dijo nada de no judicializar», insistió el anterior inquilino de La Moncloa, quien defendió una vez más que la aplicación del 155 en Cataluña fue «fundamental»para que los soberanistas supieran que el Estado tiene mecanismos para defenderse. Rechazar ahora que se juzgue a Carles Puigdemont como hace Sánchez, a modo de cesión para allanar el camino a su reelección, es algo «disparatado» que equivale a decir «que un político puede delinquir o que tiene impunidad», dijo.

Rajoy consideró la amnistía una «enmienda a la totalidad de la democracia española» un «fraude» contrario a la Carta Magna: «Si se produce, estaremos diciendo que todo lo que hizo la democracia española estaba mal hecho y era ilegítimo». Por tanto, sentencia, «moralmente es inaceptable».

Noticia Relacionada

Puigdemont afirma que «hay políticos que cuando hablan suben el precio del pan y otros que suben el de la cal viva»

M. Martínez

El fugado ironiza con que «cada día se entera de lo que está negociando y de lo que piensa» por la prensa española

Evitó opinar acerca de si estas «cesiones» van a lograr que Sánchez obtenga el apoyo de los siete diputados de Junts para ser investido presidente en caso de que fracase la investidura de Feijóo la próxima semana. Lo que sí cree es que el líder del PP «ha hecho lo que tenía que hacer», al igual que hizo él en su día: perseguir un entendimiento entre los dos grandes partidos que gobiernan España desde 1978. Una opción que el PSOE de Sánchez ha declinado para «pactar con partidos extremistas que no quieren estar en España».

Preguntado por si es buen momento para que Feijóo vaya a la investidura, se puso a sí mismo de ejemplo: «Yo fui en 2015 porque no tenía ninguna posibilidad. En 2016 conseguí pactar con CS. Y salí porque el PSOE en aquel momento se abstuvo y no quiso hacer un 'gobierno frankenstein'. Era otro PSOE» lamenta Rajoy. Acto seguido, lanzó a modo de advertencia: «Si el PSOE atendiera lo que se le dice desde sus propios entornos –en referencia a Alfonso Guerra y Felipe González para quienes 'la amnistía es la condena de esta democracia' o del ya expulsado Nicolás Redondo– y actuara como en 2016, no tendríamos este problema». Con problema, se refiere el expresidente al «chantaje» que vienen ejerciendo los de Puigdemont al Gobierno desde «que el PSOE adoptara la decisión de pactar con ellos».

En este sentido, instó a «defender» la España constitucional, la Transición, la democracia y el Estado de Derecho tanto en el Parlamento como en los tribunales porque el problema de la amnistía es que es un «torpedo en la línea de flotación de la democracia» al ponerse en tela de juicio «todo lo hecho durante estos cuarenta años».

La amnistía no es la única «concesión inadmisible» que le parece «absurdo» a Rajoy. También el uso de las lenguas cooficiales en el Congreso de los Diputados. Definió la reforma del Reglamento sacada adelante este jueves por la izquierda y los nacionalistas como «un incumplimiento más de la ley» que se suma a la larga lista de cosas «a las que se ha visto obligado el PSOE para ver si consigue la investidura».