El PSOE termina pactando con el PP la reforma del 'solo sí es sí' e Irene Montero le pide rectificar
Socialistas y populares llegan a un acuerdo sobre un tercio de las enmiendas del primer partido de la oposición
Semana clave para la reforma de la ley del solo sí es sí: el PSOE se abre a asumir enmiendas del PP
Feijóo exige a Sánchez que destituya a los ministros de la ley del 'solo sí es sí' si quiere pedir perdón
Madrid
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEl PSOE ha cerrado con el Partido Popular (PP) la reforma de la ley del 'solo sí es sí', después de haber negado durante semanas que se negociaría con el primer partido de la oposición. Finalmente, los socialistas sacarán adelante el próximo ... jueves en el pleno del Congreso de los Diputados esa reforma ante el escándalo de las rebajas de penas y excarcelaciones de condenados por graves delitos de carácter sexual. Algo por lo que el propio Pedro Sánchez pidió «perdón» este fin de semana, en una entrevista publicada por Colpisa y los periódicos regionales del Vocento, mientras que Alberto Núñez Feijóo le pidió que en consecuencia con ello destituya a los miembros de su Ejecutivo que redactaron la norma.
La reacción de la ministra de Igualdad, Irene Montero, no se ha hecho esperar. En una declaración ante los medios de comunicación antes de un acto oficial, la también número dos de Podemos ha pedido a los socialistas una rectificación (técnicamente es posible antes de la votación del jueves, pero no parece probable) y que manden un mensaje a la sociedad de que «los derechos de las mujeres no se negocian con el PP». Además, ha dicho gráficamente que «cuando el PSOE le da la mano al PP, el PP le coge el brazo entero. Y creo que es inexplicable para el Partido Socialista que las alianzas prefeministas, progresistas, plurinacionales que han servido para defender el derecho a la vivienda, no sirvan para proteger los derechos de las mujeres», en referencia al acuerdo cerrado el pasado viernes con ERC y Bildu para la ley de vivienda que establece un control de los alquileres.
Previamente, la secretaria de Igualdad de los socialistas, Andrea Fernández, a su llegada a la reunión y antes de la misma, le pedía a su socio de coalición «madurez». El acuerdo entre socialistas y populares ha contado con el apoyo de Ciudadanos (CS) y el PNV y con el rechazo del resto de grupos, tanto los de la izquierda y nacionalistas como Vox.
Las portavoces de ERC y Bildu en la comisión han mostrado igualmente su descontento por el acuerdo de los dos grandes grupos, que a la salida de la reunión la republicana Marta Vallugera ha calificado de «indignante». Sin embargo, la portavoz de la Ejecutiva Federal del PSOE y ministra de Educación, Pilar Alegría, ha rebajado el acuerdo con los populares, asegurando que se han aceptado enmiendas meramente «semánticas», informa Víctor Ruiz de Almirón. Preguntada sobre el hecho de que finalmente se llegue a un acuerdo con el PP, pese a que en un primer momento el portavoz parlamentario socialista, Patxi López, despreció esa posibilidad, Andrea Fernández ha aseverado que «en el trámite parlamentario siempre hablamos con todos los grupos parlamentarios con normalidad y a lo que aspiramos es a tener el mejor texto posible».
Los dos primeros partidos del Congreso han llegado a un acuerdo sobre cinco de las catorce enmiendas presentadas por los populares antes de la reunión de la ponencia que se ha reunido este lunes, y que ha dejado listo un texto que el martes se aprobará en la comisión de Justicia de la Cámara Baja. Dos de ellas se aceptan directamente y otras tres se han transaccionadado entre los dos grandes partidos.
Feijóo exige a Sánchez que destituya a los ministros de la ley del 'solo sí es sí' si quiere pedir perdón
Mariano CallejaEl presidente del PP tacha de 'chapuza' la norma aprobada por el Gobierno y subraya que el jefe del Ejecutivo solo se ha acordado de las víctimas por la cercanía de las urnas
Fuentes del Grupo Popular ya adelantaban antes de la reunión de la ponencia un acuerdo con los socialistas para transaccionar una de las catorce enmiendas que registraron la semana pasada.
En concreto, es la enmienda que corrige la destipificación de la distribución o difusión pública a través de internet, del teléfono o de cualquier otra tecnología de la información o de la comunicación de contenidos específicamente destinados a promover, fomentar o incitar a la comisión de los delitos de agresiones sexuales cuando se trate de menores de dieciséis años.
Se trata de algo que introdujo en 2021 la 'ley Rodhes' de protección de la infancia y que quedaba eliminado, según denunció el PP, por la supresión de un capítulo en una disposición adicional de la ley del 'solo sí es sí'. Igualmente, el PSOE acepta el otro 'agujero' detectado por el PP, y que en este caso afectamente directamente a la propia Ley de Garantía Integral de la Libertad Sexual, dado que por un error en la trasposición de las directivas europeas para derogar el delito de sedición, algo que se hizo en pago a ERC, se quedó en el limbo el delito de trato degradante, que ahora se recupera.
En las otras tres enmiendas, las transaccionadas o acordadas, el PSOE las reduce a dos, dado que aseguran que una está sujeta aún a discusión o «viva», como suele decirse en el argot parlamentario, por lo que podría modificarse de nuevo en la comisión de Justicia del martes o incluso poco antes de la votación final el jueves en el Hemiciclo. Una de ellas afecta al concepto de consentimiento, para socialistas y Unidas Podemos el «corazón» de la norma, ya que modifica el artículo 178 del 'solo sí es sí'. A la modificación ya realizada por el PSOE en su proposición de ley original (la que presentó unilateralmente, sin Unidas Podemos) el PP añade otra, argumentando una mejora técnica. Finalmente, la transacción entre ambos tacha una frase inicial en el apartado dos de ese artículo, que decía textualmente: «A los efectos del apartado anterior». Para PSOE y PP, una mejora del texto, pero para la diputada de ERC Vallugera eso podría esconder algo más, según ha declarado tras la ponencia.
En ese artículo 178, y es una de las claves de la reforma para evitar nuevas rebajas de penas, el PSOE establece una horquilla entre uno y cinco años de prisión para la agresión sexual cometida «empleando violencia o intimidación o sobre una víctima que tenga anulada por cualquier causa su voluntad». Elevando así en un año la pena máxima que contempla la norma original, en vigor desde el pasado otoño.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete