Podemos rebaja a «puro humo» el plan de medios de Sánchez y amenaza con tumbar sus medidas

A los duros reproches de la oposición, que acusa al Ejecutivo de Pedro Sánchez de querer censurar a los medios, se suman ahora las críticas de partidos como Podemos y ERC, aunque en sentido contrario a las de Santiago Abascal y Alberto Núñez Feijóo: el Gobierno se queda demasiado corto. Al menos así lo perciben la formación liderada por Ione Belarra, quien este miércoles, en los pasillos del Congreso de los Diputados, ha mostrado su descontento y ha amenazado con no apoyar las iniciativas enmarcadas en esta hoja de ruta si no se acepan sus ideas, y la que representa en Madrid el independentista Gabriel Rufián.

Para Belarra, el plan de Sánchez es «puro humo». «Por un lado, ni plantea ninguna medida para hacer frente a la guerra sucia judicial y, además de eso, no hay ninguna medida que nos permita afrontar los bulos, las mentiras que cada día se extienden, no solo desde los panfletos de ultraderecha que existen en este país, sino también desde grandes tribunas mediáticas», ha criticado, entre señalamientos a comunicadores y periodistas como Pablo Motos y Ana Rosa Quintana, a los que ha acusado de «mentir cada día» en sus programas «sin que nadie se lo impida» y sin medidas que «permitan equilibrar la balanza».

«El Gobierno no solo ha renunciado a hacer cualquier tipo de transformación social y feminista, sino que ha optado por un camino desde mi punto de vista erróneo, que es un camino agónico y que le abre la puerta a la derecha y a la ultraderecha», ha señalado Belarra en declaraciones a los medios de comunicación. Ha incidido en esa «agonía» que, a su juicio, evidencia en esta parte de la legislatura el Gobierno, incapaz de sacar adelante algunas iniciativas, con el veto casi constante, como se produjo ayer, de Junts.

Sin embargo, en Podemos no consideran que el problema sea únicamente Junts, sino que lo achacan a un PSOE que «ha renunciado a las transformaciones». «La legislatura progresista quedó enterrada en julio cuando el Partido Socialista acordó con el Partido Popular legitimar la guerra sucia judicial y renunció a que pueda haber una verdadera transformación del Poder Judicial en España», ha señalado.

Belarra ha asegurado que esa decisión del Ejecutivo está teniendo ahora sus consecuencias, al oponerse Sánchez y sus ministros a librar «las grandes peleas democráticas» que, según cree, deben darse en el terreno judicial y mediático. El efecto del acuerdo para desbloquear el Poder Judicial «no se vio inmediatamente», ha sostenido la líder de Podemos, pero «está demostrando que haber renunciado a dar de verdad la pelea por la regeneración democrática es lo que hace que el bloque democrático y plurinacional se rompa y hoy sea imposible utilizarlo para gobernar».

Fuentes de ERC consultadas por ABC sentencian que el paquete de medidas aprobado por el Consejo de Ministros les parece «de chiste». Varios de los socios, también en esto se incluye Junts, comentan que a la regeneración presentada por el Gobierno le falta la «pata judicial», después de que el Ejecutivo, a raíz de la imputación de la mujer del presidente, Begoña Gómez, comenzase a reconocer en abril la existencia de esa supuesta guerra judicial contra adversarios políticos que, durante años, denunciaron Podemos y el independentismo.

Estas mismas fuentes dicen que se posicionarán definitivamente cuando conozcan «medida a medida», pero no dudan en afirmar que lo visto hasta ahora es «una declaración de intenciones muy tibia». La fragilidad parlamentaria del Gobierno, evidenciada este martes cuando el voto en contra de Junts tumbó una ley de Sumar para regular los alquileres de temporada, le obligará también a negociar ese plan de regeneración, en el que sus aliados habituales quieren meter cuchara e influir lo máximo posible.

Desde ERC señalan que no queda claro –hay diferencia de interpretaciones entre PSOE y Sumar– si el plan afecta a la Corona ni si la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana, la conocida como ‘mordaza’, afecta a los puntos que el Gobierno se negó a retocar la pasada legislatura, provocando su caída por la oposición de ERC y de Bildu.

En lo tocante a la prensa, ERC recuerda que ya planteó peticiones al respecto en el Congreso, como la creación de un Consejo Profesional de Buenas Prácticas. Podemos, en este apartado, quiere que se incluyan las medidas recogidas en la ley que registró para que directivos y presentadores tengan que hacer una declaración de bienes, entre otras cosas.