Los bares vascos podrán vender café para llevar sin comida

Al contrario de lo que sucede con el alcohol, el café u otras bebidas no alcohólicas pueden consumirse sin ningún problema en la vía pública. No obstante, en un comunicado el Ejecutivo advirtió de que esta práctica está «expresamente desaconsejada» . Zupiria recordaba en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que precisamente el objetivo de cerrar bares y terrazas es el de evitar el riesgo que conllevan las concentraciones de personas que están fuera de su grupo de convivencia y que, al comer, beber o fumar, inevitablemente se bajan la mascarilla .

Ocurre que, tras el cierre de la hostelería, las autoridades han constatado la aparición de numerosos envases de bebidas vacíos en las papeleras, así como muchas más colillas de lo habitual junto a bancos de calles y parques.

A pesar de este riesgo, al equipo de Urkullu no le ha quedado más remedio que echar por tierra la restricción. Asume que para los hosteleros supone un «agravio comparativo» respecto a los dueños de panaderías y pastelerías que sí pueden vender cafés o bebidas sueltos. Finalmente, también los bares podrán hacerlo aunque no haya un pedido previo de comida.

La amenaza del coronavirus sobrevuela todavía la Comunidad Autónoma vasca, que ayer, aunque por segunda jornada consecutiva no alcanzó el millar de nuevos contagios (941), registró una tasa de positividad del 8,9%. Es decir, 1,1 puntos más que el domingo . La transmisión sigue siendo «muy alta», reconoció el portavoz del Gobierno, que avanzó que las medidas restrictivas se mantendrán «durante algún tiempo». Se calcula que, al menos, hasta diciembre.

El levantamiento de la prohibición de vender bebidas no alcohólicas sin pedido de comida alivia ligeramente la carga de los hosteleros. Pero el malestar sigue creciendo en el sector, que acusa al Gobierno vasco de imponer medidas «improvisadas» y ofrecer ayudas «insuficientes» , en referencia a la partida de 30 millones que anunció la semana pasada el consejero de Comercio, Javier Hurtado —se suman al bote de 45 millones de euros incluidos en el Plan de Resistencia de este departamento—. Asociaciones de hostelería de Álava, Vizcaya y Guipúzcoa advirtieron este martes en el Parlamento que el sector perdió en esta autonomía cerca de 200 millones solo durante el primer cierre.