Sanfermines 2012: Mamá, tranquila que duermo bien

Esta noche, Pamplona ha superado ampliamente el millón de personas cuando de normal alcanza únicamente las 200.000. No hay sitio para todos. Pero el ser humano tiene la necesidad biológica de dormir. Muchos pamploneses acogen en sus casas a amigos y conocidos de fuera que desean conocer los Sanfermines. Y son muchos más quienes acuden a la capital navarra para disfrutar sin conocer a nadie.

Por eso, el domingo por la mañana es muy frecuente ver a gente durmiendo en los rincones más insospechados. Parques, jardines, rotondas de las calles, medianas, los propios coches… cualquier sitio y cualquier postura es buena después de haber estado toda la noche bailando, bebiendo, divirtiéndose…

Los hay que saben a conciencia que van a dormir en algún parque o jardín y vienen completamente equipados. Otros traen lo justo para dormir un poco que engañe al sueño y continuar al despertar con la juerga o simplemente volverse a sus casas. También los hay que han llegado con la esperanza de encontrar a alguien que les diera cobijo. Y muchos simplemente han decidido dormir en el momento en que les ha entrado el sueño o cuando, tristemente, el etanol les ha dicho que ya habían dado todo de sí.

Normalmente, se duerme con el grupo con el que se ha venido a los Sanfermines. También hay quien duerme solo, en el primer sitio que se ha encontrado cuando el sueño ha comenzado a hacer acto de presencia. También habrá quien ha dormido con una persona que ha conocido esa misma noche y han decidido darse calor. Aunque estamos en verano, una de las características que tiene Pamplona es que por la noche normalmente refresca y por la mañana puede llegar a hace frío.

Lo que no sabemos es cómo se levantarán esas personas. Además de una cierta resaca si el consumo de alcohol fue excesivo la noche anterior, las posturas inverosímiles que cogen algunos hacen sospechar que el dolor de espalda puede ser, cuando menos, molesto. Eso sí, los quiroprácticos deben de frotarse las manos cada vez que llegan los Sanfermines.

Afortunadamente para la imagen de la ciudad, a partir de la tarde del domingo, muchos foráneos comienzan a regresar a sus casas y en los próximos días los parques y jardines volverán a ser lo que siempre son, un lugar de esparcimiento, de aire limpio que hacen de Pamplona la ciudad española con más espacio verde por habitante.