Lobato se reivindica con un tono duro frente a Ayuso en el debate de la región y le exigirá «lealtad» frente al Gobierno de Sánchez

El congreso federal del PSOE está a la vuelta de la esquina, a finales de noviembre, y pocos meses después se celebrará el regional madrileño. Lobato se juega su continuidad en el puesto y no es previsible que arriesgue demasiado con un perfil propio, como ya se vio en el reciente Comité federal.

Ayuso afronta su primer debate sobre el estado de la región con mayoría absoluta. Está tranquila y «en forma». «Es el gobierno más en forma de España en este momento», aseguran en Sol. Se toman este tipo de citas como una demostración de fuerza y a la oposición no le queda otra opción que hacer un discurso para su propia galería y su público más fiel, para recordarles que siguen ahí plantando cara a la presidenta regional, a sabiendas de que poco o nada van a sacar de una cita parlamentaria como esta. El ruido suele ser el mejor aliado de los partidos la oposición en estos casos para ganar titulares, y tanto el PSOE como Más Madrid y Vox lo buscarán, cada uno en el terreno donde se siente más cómodo.

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El portavoz del PSOE mirará con un ojo a Ayuso y con otro a su partido. Sabe que ahora mismo le observan con lupa, en una especie de examen interno continuo y alternará las críticas a la presidenta regional con propuestas prácticas para hacer visible que tiene una alternativa.

Lobato quiere centrar su intervención en el pleno de la Asamblea, que no se producirá hasta mañana, en dos cuestiones. Por un lado, se preguntará qué está haciendo el Gobierno de Ayuso por los madrileños. «¿De qué sirve que haya un Gobierno autonómico? ¿Sirve para que esté mejor la educación, la sanidad?», comentó ayer. Y se respondió él mismo: «Yo creo que no. Hay 30.000 chavales sin FP, la universidad sufre un desmantelamiento presupuestario tremendo, en sanidad hay listas de espera récord, tenemos las urgencias de los centros de salud sin médicos... No creo que esté sirviendo de mucho el Gobierno autonómico a los madrileños».

Además, atacará a la presidenta por el flanco del papel que tiene Madrid en España. Ahí, denunciará la «falta de lealtad» de Ayuso con el Gobierno de Sánchez, un conflicto que ya fue motivo de una tensa discusión en la reunión que mantuvieron hace una semana en la Real Casa de Correos. Lobato exige a Ayuso que busque la coordinación con el Ejecutivo, «en vez de estar todo el día insultando, atacando, confrontando». «¿Es útil a los madrileños que Ayuso insulte sin parar al Gobierno de España? No les sirve de nada», denuncia. «Debemos tratar con respeto y coordinación a otras instituciones para que las cosas funcionen mejor».

Más Madrid pondrá el dedo en la llaga de la corrupción y de los casos en los que algunos cargos del PP se encuentran inmersos en procesos judiciales. La condena de siete años de cárcel a Alfredo Prada, el que fuera vicepresidente de Esperanza Aguirre, por irregularidades en el proyecto fallido de la Ciudad de la Justicia entre 2005 y 2011, servirá a la oposición para revivir el principal fantasma de los populares. Además, Manuela Bergerot exigirá la dimisión o destitución de Ana Millán, vicepresidenta en la Asamblea y número tres de Ayuso en el PP, al estar investigada por la presunta comisión de delitos de corrupción en relación con varios contratos presuntamente irregulares cuando fue alcaldesa de Arroyomolinos. Más Madrid ha pedido su reprobación en la Asamblea.

También aprovechará que la alcaldesa de Alcalá de Henares, Judith Piquet, tendrá que declarar como investigada por un presunto delito de infidelidad en la custodia de documento en relación con la supuesta filtración de dos denuncias de agresiones sexuales que se vincularon a inmigrantes.

Más Madrid llevará sus propias propuestas relacionadas con cuatro áreas: vivienda, su prioridad, sanidad, formación profesional y la acogida «solidaria y responsable» de menores inmigrantes no acompañados (menas).

La portavoz de Vox, Rocío Monasterio, insistirá en las líneas principales de su partido: por un lado, la inmigración irregular y los menas. Volverá a exigir mano dura y el cierre de todos los centros. Vox ha propuesto una comisión de estudio sobre las bandas juveniles violentas, ante el incremento en el número de incidentes este verano. Además, Monasterio exigirá a Ayuso un recorte de gasto público en la Comunidad de Madrid y más rebajas de impuestos, para tratar de competir con la presidenta regional en un terreno en el que el PP ha izado su bandera en Madrid desde hace años.