El TSJM reconoce como accidente de trabajo un suicidio provocado por estrés y acoso laboral

En el momento de su muerte, el fallecido prestaba servicios con la categoría de jefe de Planificación y Control en la empresa Mercados Centrales de Abastecimiento de Madrid (Mercasa), que fue objeto en 2017 de una investigación por parte de la Audiencia Nacional. Resultaron imputados 20 directivos, entre los que no se encontraba el finado.

De acuerdo con los informes periciales, el fallecido prolongaba su jornada laboral en su domicilio durante varias horas todos los días laborables y también los fines de semana, ya que, a raíz de la investigación, su departamento «multiplica el trabajo que tiene que realizar». «Añadido a su día a día, deben preparar toda la documentación que se les va requiriendo», recogen.

«El finado tiene un exceso de horas trabajadas y, aunque se establece que trabaje presencialmente menos horas, se acredita, como ya hemos dicho, que está conectado durante todos los días, incluso sábados y domingos y festivos y también por la noche», apuntaba la sentencia de primera instancia confirmada ahora por el tribunal madrileño.

Por eso, el TSJM considera: «Existe una clara conexión o relación de causalidad entre la acción suicida y el trabajo. Así lo manifestó también el propio fallecido en las cartas que dejó escritas a su pareja, a su hijo y a sus copañeros». En ellas, detalla que la única causa para quitarse la vida es el cuadro de extrema ansiedad y estrés sufrido al verse «desbordado» en el trabajo.

El suicida señala también a su superiora. De acuerdo con la sentencia, «le ha hecho la vida imposible, ha maquinado contra él, le ha aislado, gritado, ninguneado y ha jugado en connivencia de las chicas a aislarle».

«Reducen plantilla, me avisan tarde de las cosas, actúan por su cuenta, arriba y abajo me atacan, y por los lados soy víctima colateral de los tiempos», lamenta en otros mensajes.