Un falso club de cannabis era la tapadera para vender drogas a más de 400 adultos y menores

Se trata del principal punto de venta de drogas como la marihuana y el hachís del distrito de Ciudad Lineal. Y ha sido desmantelado en el marco de la operación Argonautas, llevada a cabo entre la Policía Nacional y la Municipal de la capital. Hay seis detenidos, acusados de pertenencia a organización criminal y por delitos contra la salud pública.

Vendían la droga junto a un centro escolar y parques que suelen frecuentar menores, que eran parte de su clientela, indican a ABC fuentes de la investigación.

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Carlos Hidalgo

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El dispositivo policial arrancó hace algo menos de dos meses. Las continuas quejas del vecindario, pero también de personas que veían a jóvenes consumiendo drogas en las proximidades del colegio y de zonas verdes como el parque de los Mosquitos (llamado en realidad Periodistas José Couso y Julio Anguita Parrado); y justo al lado de unas canchas deportivas, y tras una biblioteca y la propia Junta Municipal del Distrito de Ciudad Lineal. Precisamente en un costado de allí está la Unidad Integral de la Policía Municipal.

Se trata, además, de una zona muy frecuentada por miembros de bandas latinas, sobre todo de los Dominican Don't Play (DDP), donde han tenido enfrentamientos con los Trinitarios, sus principales rivales.

Los agentes se pusieron manos a la obra en la investigación. Localizaron el falso club de fumadores, situado en la calle de Argos, 7. Y, después de Reyes, comenzaron a conseguir las pruebas clave: los testimonios de los clientes. Para ello, estuvieron cinco días realizando vigilancias en las inmediaciones. Durante esas 'tronchas', como se las conoce en el argot policial, los agentes identificaron a más de 400 personas que entraban en ese bajo y, a los pocos minutos, lo abandonaban.

Efectivamente, los había que se dirigían directamente al parque de los mosquitos, donde se ponían a fumar y a consumir de cualquier modo delante de niños; también es un espacio al que acuden muchos vecinos de la zona a reunirse para pasear a sus perros, además de los mencionados pandilleros juveniles.

A esos más de 400 clientes los filiaron pero también les pillaron la droga que llevaban encima, y reconocieron a los agentes dónde la habían comprado. Así, fue clave todo ese trabajo de campo para conseguir la pertinente orden judicial de entrada y registro en el falso club de cannabis.

Cuando lo hicieron, el 12 de enero, arrestaron a los seis encartados: cuatro hombres y dos mujeres, de entre 36 y 21 años, todos españoles. Solo uno de los varones de mayor edad tenía una reseña policial previa, de 2012, por un robo con violencia e intimidación, señalan fuentes del caso a este periódico.

En el registro, se encuentran 7,5 kilos de hachís y marihuana, 50 bolsas con THC (tetrahidrocannabinol, principal activo psicotrópico del cannabis) y 10 botellas de CBD (cannabidiol, uno de los componentes del cannabis y cuyo porcentaje de concentración marca si los productos vendidos son legales o no). Una buena parte de la droga estaba escondida en una caja fuerte, que desprendía un olor muy fuerte. En una registradora, había unos 1.000 euros efectivo.

En el mostrador había una báscula de precisión y útiles de preparación para la venta directa de las sustancias ilegales. Ante las sospechas iniciales, la Brigada Provincial de Información abrió una investigación para determinar si, como parecía, pudiera haber pandilleros latinos entre la clientela. Fuentes del caso han precisado que, finalmente, no constan entre los identificados miembros activos ni en estudio de estas organizaciones criminales.

Por otra parte, la Policía Municipal de Madrid ha detenido esta semana, también en Ciudad Lineal, a un usuario de VTC que trasladaba más de 2 kilos de marihuana tras una persecución a pie, según informa Ep.