Ayuso intenta frenar 'in extremis' la huelga en Atención Primaria

Este frente abierto es el último que le queda por sofocar a la presidenta Isabel Díaz Ayuso, que tuvo que enfrentarse a una movilización de la izquierda el pasado domingo. La protesta tenía como objetivo la reivindicación de una gestión más eficiente de la sanidad madrileña, pero se convirtió en una moción de censura en la calle contra la presidenta. La masiva asistencia tuvo como respuesta una nueva negociación para intentar solucionar el problema.

Una vez cerrado el acuerdo en las urgencias extrahospitalarias, la Comunidad emplazó al comité de huelga a una reunión, pero dejó abierta la horquilla al fin de semana, sin fijar un día concreto. Ángela Hernández, portavoz de Amyts, había asegurado ayer por la mañana que estaban dispuestos a volver a sentarse en la mesa cuanto antes. La Consejería de Sanidad recogió el guante y ayer a las cinco de la tarde volvió a convocarles. El objetivo es consensuar una solución que frene la huelga indefinida convocada a partir del lunes, y termine con la situación de inestabilidad que vive la Sanidad madrileña. Después de las protestas, el ambiente es más distendido, como así lo señaló Hernández, al afirmar que «el talante de la Dirección General de Recursos Humanos es mucho más positivo» que antes.

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Por su parte, el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, advirtió de que «la Consejería de Sanidad no es sospechosa de no tratar de llegar a acuerdos»: «Siempre lo hemos hecho y vamos a seguir haciéndolo».

Ante la previsión de que se mantuviera la huelga en estos centros de Atención Primaria, las dos partes incluso se reunieron el jueves para fijar los servicios médicos en cada centro de salud.

Al paro convocado por Amyts están llamados un total de 4.240 médicos de Familia y 720 pediatras que prestan servicio en la región. Su principal reclamación es una reducción de la agenda para poder atender diariamente a un máximo de 31 pacientes, lo que implicaría poder dedicar un mínimo de 10 minutos a cada uno, y de 21 para los pediatras, con un tiempo de dedicación de 15 minutos.