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Metro de Madrid aún no despega

El principal medio de transporte de la región todavía no alcanza el ritmo prepandemia: está al 80 por ciento y espera crecer hasta fin de año

Usuarios entrando en la estación de Metro de Gran Vía ISABEL PERMUY

Sara Medialdea

Una estación cualquiera del Metro de Madrid. Nueve de la mañana, en plena hora punta matinal. Frecuencia de paso: 2 minutos. Llega el tren y los viajeros del andén entran en los vagones y se sientan. Porque sí, hay asientos libres . Trasbordo, siguiente andén. Un minuto de espera y de nuevo llega el tren, éste sin asientos libres pero bastante menos lleno de lo habitual. Metro de Madrid aún está recuperándose de los efectos de la pandemia.

Los datos confirman la impresión: el principal medio de transporte público de la región rondaba ayer los 1,8 millones de viajeros por jornada. Una cifra que supone en torno al 80 por ciento de la que era habitual antes de la pandemia .

Los técnicos de la empresa observan una tendencia al alza en el número de usuarios, por lo que confían en llegar a los dos millones de viajeros a final de año: «Estamos creciendo y seguiremos creciendo».

A la hora de buscar razones a que Metro no despegue, en la compañía no creen que la falta de viajeros se deba a la pandemia, y al miedo que puede generar en algunos usuarios el uso de un transporte público masivo o estar en aglomeraciones de personas. De hecho, apuntan en otra dirección a la hora de buscar razones : lo achacan a que aún se mantienen elevados porcentajes de teletrabajo , «y la movilidad por trabajo es la principal causa por la que los usuarios utilizan el Metro».

Arriba, en la superficie, los atascos en la ciudad y todos sus accesos son peores que nunca. Lo aseguran los taxistas, quienes más horas se pasan al volante, y lo confirma cualquiera que tenga que entrar en la capital o atravesarla en la hora punta de la mañana o de la tarde.

En el subsuelo, Metro va remontando el vuelo pero aún no despega. Hay que recordar que el parón fue casi total cuando se decretó el confinamiento, en marzo de 2020. Desde entonces, su evolución ha vivido varios dientes de sierra, directamente relacionados con las olas de pandemia y las restricciones a la movilidad que se iban imponiendo. El temporal Filomena también se dejó sentir. A partir de la primavera, comenzó una recuperación lenta pero, según la compañía, continuada.

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