La línea 6 de Metro reabrirá el lunes con un nuevo sistema «más seguro, rápido y barato»
Era inevitable no acordarse ayer de Magdalena Álvarez. La ex ministra de Fomento dijo en su día que el único lugar en el que podía estar Esperanza Aguirre en el Aeropuerto de Barajas era colgada de una catenaria. Y ayer su afirmación -demasiado tarde para ... ella- se hizo realidad. Y, además, por partida doble porque también tuvo que descolgarse por ahí Alberto Ruiz-Gallardón. Una escena por la que se hubiera derretido de placer. Lo cierto es que la presidenta y el alcalde acudieron a la estación de Avenida de América para rematar las obras de la nueva catenaria de la línea 6, que, tras tres meses cerrada por tramos, se reabrirá el lunes.
Aguirre y Gallardón tuvieron que «arremangarse» para colocar, de manera simbólica, los últimos tornillos de esta nueva instalación, así como de las nuevas vías por donde pasarán los vagones. Tranquilos todos, porque después fueron los operarios expertos para rematar todo lo que habían iniciado las dos autoridades madrileñas.
Todas estas mejoras permitirán mejorar la eficacia de la línea 6 de Metro. «Los trenes circularán más rápido y, además, serán más fiables y tendrán un coste de mantenimiento inferior», comentó Aguirre. El coste de la inversión asciende a 27 millones, aportados a parte iguales por la Comunidad y el Ayuntamiento a través del Consorcio Regional de Transportes.
Obras hasta 2011
«Esta es la línea favorita de los madrileños», apuntó la presidenta autonómica. Y es que por la 6 pasan cada día 320.000 personas, lo que se traduce en 120 millones a lo largo del año. Sin embargo, Gallardón recordó que el Consorcio seguirá financiando obras de mejora en este servicio y que no acabarán hasta finales de esta legislatura, en 2011. En total, está previsto destinar un total de 175 millones de euros.
«Será entonces -dijo el alcalde- cuando se habrá acabado de instalar un sistema de señalización vía radio que aumentará la capacidad de transporte en toda la línea, se habrán sustituido 68 escaleras mecánicas en 11 estaciones y contará con 17 estaciones -el 60% de toda la línea- totalmente accesibles», apuntó Gallardón.
Treinta nuevos trenes
Esperanza Aguirre, por su parte, añadió que también se van a incorporar 30 nuevos trenes y que se está instalando un nuevo sistema de control de tráfico y comunicaciones que se conoce por las siglas CBTC (Control de Tren basado en Comunicaciones), que permite controlar la posición de los convoyes en tiempo real e incrementar la frecuencia de paso de los trenes.
En concreto y sumados los convoyes de ambos sentidos, será posible que circulen 58 trenes por hora de forma simultánea, frente a los 44 actuales. «Esto supondrá que de una capacidad actual de 26.000 viajeros por hora pasaremos a 34.000 por hora, es decir, un 31% más», precisó la presidenta.
La nueva catenaria, de cuya tecnología tiene la patente Metro de Madrid, sustituye 47 kilómetros -23,5 por sentido- de cable antiguo por otro rígido que consigue un coste de mantenimiento muy inferior al tradicional, además de una mayor seguridad y confort en el viaje.
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