Exceso de litigiosidad

Ello impone la instauración de medidas tendentes a desjudicializar determinadas materias que pueden ser sustanciadas y resueltas fuera de la órbita judicial, tales como cuestiones de jurisdicción voluntaria, donde otros operadores jurídicos, como Registradores y Notarios pueden resolver perfectamente dichas controversias (expedientes de dominio, declaración de herederos abintestato, etc.).

Igualmente, es imprescindible la adopción de medidas de agilización procesal, esencialmente en materia de recurso, que simplifique y agilice procedimientos. Procede, asimismo, expulsar de la jurisdicción determinadas materias de escasa relevancia jurídica, tales como las infracciones bagatelas, faltas reguladas actualmente en el Código Penal y analizar si resulta conveniente e mantenimiento del acceso a la jurisdicción asuntos civiles cuyo importe de cuantía de reclamación no supere los 100 euros, tal como ocurre en Alemania.

Evidentemente, deben potenciarse mecanismos de composición al margen del ámbito judicial, como la mediación y arbitraje, pero con una correcta regulación que garantice la imparcialidad objetiva, con la finalidad que sus acuerdos sean cumplimentados voluntariamente por las partes y no se acuda, de forma reiterada, como ocurre en la actualidad, a la ejecución del acuerdo arbitral a la jurisdicción, lo cual ocasiona una duplicidad de actuaciones y no desatasca la carga de trabajo de los Juzgados.

José Luis González Armengol es juez decano de Madrid