El PP da por zanjado el asunto de la multa por velocidad a Baltar, quien guarda silencio

Por el momento, el caso ha llegado a un pleno extraordinario, donde el Partido Popular, que votó en contra de la moción de urgencia presentada por los socialistas, dio por zanjadas las explicaciones al entender que el presidente provincial ya respondió a las preguntas formuladas en esa ocasión tanto por el PSOE como por el BNG en el pasado pleno ordinario, algo que no satisfecho a socialistas ni al grupo nacionalista.

Con Baltar, que se limitó a presidir la sesión y en silencio, el portavoz del grupo popular, Plácido Álvarez, fue el encargado de dar las explicaciones oportunas. El popular dio por buenas las explicaciones ofrecidas por el presidente de la Diputación en la sesión plenaria de la semana pasada, cuando atribuyó el exceso de velocidad a un «despiste» en «una recta sin referencias». Además, recordó que la sanción administrativa ya fue abonada, según confirmó el propio presidente provincial, a la espera ahora de su citación el día 9 en un juzgado de Puebla de Sanabria para dilucidar las posibles responsabilidades penales por la conducción acusado de un supuesto delito contra la seguridad vial.

«Esta moción ya ha sido debatida suficientemente el pasado 28 de abril. Las mismas cuestiones fueron respondidas hace seis días y el propio presidente quien también transmitió disculpas públicas por el error cometido«, zanjó Álvarez Dobaño, quien acusa a los grupos de la oposición de buscar con este pleno «su parcela de protagonismo» llevando el caso a «lodazal político» a las puertas de una campaña electoral con el objetivo de «buscar barullo mediático» tras asegurar que el caso no tiene más recorrido. Sea como sea, Baltar ahora se enfrenta a un delito que le podría acarrear una multa y la retirada del permiso de conducir.

Los portavoces de los principales grupos de la oposición, Ignacio Gómez (PSOE) y Bernardo Varela (BNG) han recordado que esta multa no es la única que ha recibido el coche que conduce Baltar y que no es un hecho aislado sino que ya recibió una similar en 2019, en este caso, por circular a más de 170 kilómetros por hora en un tramo limitado a 90 y en la que no se identificó al conductor lo que supuso más gasto para las arcas municipales.

El más incisivo, Ignacio Gómez interpeló a Baltar a que aclare por qué uso un coche oficial cuestionando que sea el primero que hace alarde de código ético y de transparencia e incluso, le ha retado a que tenga la «valentía» de reconocer que era él quien conducía el vehículo «a 157 kilómetros por hora» en 2019 en una zona de 90.

«Aquí hay incertezas o cuestiones que están cuando menos en entredicho con respecto a la labor que hacen los funcionarios en esta casa, a los que está poniendo a los pies de los caballos y creo que eso es un problema grave«, ha apuntado Gómez, quien advierte de que el partido no va «a parar aquí». «¿Va a dejar a los pies de los caballos a la persona a cargo del parque móvil de la diputación?», apostilló el diputado, quien llegó a apelar a los compañeros de partido, para pedirles que dejen de apoyar a su líder.

El BNG pone en entredicho la supuesta agenda oficial de Baltar en Madrid llegando a afirmar que «aquí lo que hay es un uso espúreo de un vehículo público por parte del presidente, que iba a 215 kilómetros por hora que es un delito. A partir de ahí queremos dejar de manifiesto que es un síntoma de como se maneja esta provincia, con un presidente que entiende que es su cortejo personal y que hace y deshace a su antojo, algo gravísimo en pleno siglo XXI«, apuntó el diputado del BNG, Bernardo Varela.

Mientras tanto, el político orensano ha optado por el silencio y se ha limitado a aclarar por escrito a que el exceso de velocidad se debió a «un despiste» cuando conducía por «una larga recta» y cuya multa ya se encargó de abonar. Aclaró que el día que fue interceptado por la Guardia Civil conducía un vehículo oficial pese a ser domingo porque al día siguiente tenía una reunión en Madrid con el gerente de una fundación llamada Democracia y Gobierno Local y con «el presidente del Instituto para el Futuro del Turismo». Además, aclaró que no pasó dietas ni durmió en Madrid.

El PSdeG-PSOE, quien ha pedido sin éxito a Baltar que aclare si ese día cogió el coche oficial «de su garaje particular», amenaza con solicitar «las cintas de las cámaras de seguridad» del parque móvil de la diputación para comprobarlo e ir a la Fiscalía una vez que Baltar declare en el juicio rápido. Por su parte, el BNG ha pedido la creación de una comisión especial para comprobar lo ocurrido en el parque móvil del ente provincial.