Un acuerdo con «visión de país» en favor de estudiantes, universidades y hospitales

Tras participar en la reunión en la que ambos conselleiros han ratificado el convenio junto a los rectores de las tres universidades, el departamento de Educación ha emitido un comunicado que destaca que tanto el titular de esa cartera, Román Rodríguez, como el responsable de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, han destacado el acuerdo alrededor de un documento «con visión de país» que, en su opinión, beneficia a los estudiantes de esta titulación y abre nuevas oportunidades para alcanzar altas cotas de excelencia tanto en las tres instituciones académicas como en los hospitales de Santiago, Vigo y La Coruña.

Según el mismo comunicado, todas las partes coincidieron en la necesidad de avanzar en la descentralización del grado en Medicina, «el de mayor número de plazas de nueva admisión de Galicia», como la mejor opción para aprovechar todas las capacidades tanto del Sistema Universitario de Galicia como del Sergas a la hora de formar a los futuros médicos.

Una valoración positiva radicalmente opuesta a la ofrecida por el alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero, que, en declaraciones recogidas por Ep, ha insistido este jueves en que Vigo «tiene que tener» una facultad de Medicina propia porque es un «clamor» en la ciudad», y ha responsabilizado a Alfonso Rueda y Alberto Núñez Feijóo de que no sea así.

«No nos vale ningún acuerdo en el que otras universidades, la de Santiago, ejerzan la docencia y desarrollen su actividad en Vigo», apuntó Caballero. Algo que, en sus palabras, «no es solo una cuestión de la universidad, es una cuestión de ciudad», antes de añadir que «nos van a engañar y se van a reír de nosotros otra vez».

El alcalde vigués cree que se está viviendo «exactamente el mismo debate» que cuando nacieron las universidades de Vigo y La Coruña con «argumentos de la Edad Media»: «Están privilegiando desde la Xunta de Galicia, privilegios medievales para Santiago». Esa fue la misma expresión utilizada el pasado fin de semana por la alcaldesa de La Coruña, la también socialista Inés Rey, y que llevó al presidente de la Xunta a acusarla de defender una posición «localista» en busca de «rédito electoral».