46.000 gallegos en cada escaño

Con una población regional que no alcanza los tres millones de habitantes -2.795.422 en concreto-, los 75 diputados de hoy en día representan a un total de 37.272 gallegos cada uno . Sin embargo, esta cifra alcanzará los 45.826 ciudadanos por parlamentario si la propuesta de 61 escaños se lleva a cabo . Menos diputados para más habitantes o, lo que es lo mismo, más reducción y racionalización del gasto público bajo el objetivo de conseguir una administración más solvente y competente en plena crisis.

De esta manera, Galicia se sitúa en las primeras posiciones de la lista de comunidades con menos diputados por habitantes y sigue la línea de adelgazamiento en la administración pública gallega establecida a lo largo de estos tres años de legislatura por el Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo.

En la actualidad , y con sus 37.272 parlamentarios por ciudadano gallego, la Comunidad ocupa el sexto puesto , precedida en primer lugar por Andalucía -con un diputado por cada 77.285 andaluces-, Cataluña -que alcanza los 55.849 habitantes por parlamentario-, la Comunidad Valenciana -con 51.688 valencianos-, Madrid y Castilla-la Mancha (con 50.307 y 43.170 ciudadanos respectivamente para cada diputado).

Pero estas cifras se verían afectadas de aprobarse la reforma de Feijóo. Con 61 diputados, entre los cuales se repartirían a un total de 8.554 gallegos más a sus espaldas, Galicia mejoraría su puesto en el ránking de disminución de la administración pública y se convertiría un ejemplo para todas aquellas comunidades que estén pensando en reformar su ley electoral , algo que Feijóo trasladó al resto de barones del PP en la reunión que mantuvieron con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en Génova.

Así, O Hórreo pasaría a ocupar el quinto puesto en la lista de los parlamentos más eficientes dentro del conjunto del territorio español. Una eficiencia que no solo se basa en resultados políticos satisfactorios para el conjunto de la población, sino en «hacer más con menos» , uno de los lemas con los que el propio Feijóo ha llevado a cabo las políticas de ajuste desarrolladas por su Ejecutivo.

Y ese «hacer más con menos» salpica ahora a los representantes de los ciudadanos de Galicia, que merman en número pero no en horas laborales. Bajo la responabilidad de estar defendiendo los intereses de casi 46.000 gallegos, los 61diputados de la Comunidad marcarán el punto de partida del adelgazamiento en el resto de las cámaras autonómicas.

PSdeG y BNG tienen ya sobre la mesa la propuesta del PP , que ha pedido una respuesta «con la mayor brevedad posible». Pese a su aparente negativa, han dejado translucir cuáles serán sus propuestas al documento. La principal se enfocaría a la reducción del mínimo de diputados que cada provincia tiene asignado y que en la actualidad se sitúa en diez. El PSdeG está interesado en rebajarlo para impedir que Lugo y Orense aumenten su peso representativo, puesto que consideran que son zonas en las que el PP suele obtener mayor número de votos. Creen conveniente primar más la diferencia demográfica de La Coruña y Pontevedra, dos provincias más pobladas .

Sin embargo, si se rebajara a 9 el mínimo, y en base al resultado de 2009, el reparto de fuerzas no variaría: Feijóo mantendría su mayoría. También lo haría si este mínimo se bajara a 8, aunque el PSdeG le arrebataría un escaño en ese caso. Una cifra inferior sería imposible de negociar.

Donde no habrá margen de negociación , puesto que el PP se opondrá, es en la rebaja del 5 al 3 por ciento del mínimo de representación o a la creación de una circunscripción única.

El PP remitió ayer a PSdeG y BNG su propuesta de reducción de escaños. Ambos se oponían antes de recibirla, pero enviarán sus réplicas para negociar esta reforma de la ley electoral. Entre ellas podría estar la rebaja del mínimo actual de diputados por provincia, situado en 10, con el fin de impedir un mayor peso proporcional de Lugo y Orense. También la rebaja del mínimo de representación

Es lo que el PP propone: reducir a 61 diputados, pero no variar el mínimo actual por provincia, fijado en 10 . Lugo y Orense ganarían peso proporcional, pero el resultado electoral de 2009 apenas habría variado. Quedaría PP 32, PSdeG 19 y BNG 10

Si al negociar, el mínimo de diputados se bajara a 9, La Coruña ganaría uno, que perdería Lugo . Pero, en base al último escrutinio, nada variaría. Se mantendría la victoria de Feijóo y el resultado sería el mismo que con 61 escaños y un mínimo de 10.

Siempre tomando como referencia los resultados electorales de 2009, si el mínimo de diputados por provincia se rebajara a 8 y hubiera un total de 61 escaños, el PSdeG arrebataría uno al PP. El reparto quedaría: 31 para PP, 2o para PSdeG y 10 para BNG

El BNG rechaza el recorte y pide bajar del 5 al 3% el mínimo para lograr representación por temor a las escisiones sufridas. UPyD se suma a la petición, pero apoya la reforma. Aún así, con los datos de 2009 no habría más grupos en O Hórreo

El BNG pide una circunscripción única para Galicia, en lugar de cuatro . Es muy díficil ya que supondría una reforma a fondo de ley. El escrutinio de 2009 habría permitido un bipartito de este modo , pero no lo posibilitaría si se rebajara a 61 escaños