Los exdirectivos se mostraron reticentes a enseñar sus contratos al Banco de España

De sus palabras se desprende que las cosas no fueron tal y como las expuso el entonces copresidente de Novacaixagalicia, Julio Fernández Gayoso. Quien el magistrado considera «colaborador necesario» -también imputado en la causa- en la operación que habría beneficiado a los cuatro financieros que obstentaban el poder ejecutivo antes de su conversión en banco, aseguró haber remitido una copia de los mismos el 11 de abril de 2011. Fallan entonces la fechas, puesto que los testigos aseguraron que no los recibieron hasta el mes mayo, cuando ya en diciembre de 2010 habían oído de su existencia.

Lo que al parecer no han podido determinar ambos técnicos es si lo ocurrido con las millonarias indemnizaciones percibidas puede valorarse como una interpretación , aunque incorrecta, de la norma laboral o se trata de un desvío de fondos , base argumental de su imputación en el proceso.

Según reza en la querella presentada por la Fiscalía Anticorrupción los imputados «dispusieron de forma fraudulenta de bienes de la entidad, ocultando al consejo de administración y al Banco de España el importe de sus prejubilaciones , y a las cuales no tenían en parte derecho».