Gallardo debuta como diputado y aforado con ataques a Guardiola en la Asamblea de Extremadura

Minutos antes de las 09.00 horas, Gallardo llegaba a la Asamblea de Extremadura entre una notable expectación y presencia de medios de comunicación. Esbozaba una sonrisa ante las cámaras y pronunciaba solo dos palabras: «Normalidad democrática». La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, antes del arranque del pleno, tachaba los movimientos del líder socialista de «fraude de ley» por aforarse mientras está procesado por prevaricación y tráfico de influencias por el caso David Sánchez.

El secretario general de los socialistas extremeños ejerció, por primera vez, como líder de la oposición, tomando la palabra, ya como portavoz de su grupo parlamentario. Con todos los focos apuntándole, Gallardo aprovechó para sacar pecho y reivindicarse, asegurando que viene a la Asamblea para «quedarse» y «dar batalla» en representación de «miles de extremeños».

En su estreno, el líder socialista ha cuestionado el gobierno popular de Guardiola, al que culpabiliza de la «angustia de miles de familias» por la «deriva» a la que, dice, están llevando «a esta tierra»: «Extremadura ha pasado de ser una comunidad estable y atractiva para la inversión extranjera, a la inestabilidad, al ruido y los líos de las derechas».

Por su parte, la presidenta de la Junta ha sido especialmente contundente, reprochándole a Gallardo que no viene a «dar batalla», sino «buscando refugio y dinamitando su propio partido, pisando a quien haya tenido que pisar».

Guardiola ha acusado a Gallardo, en sus palabras un «aforado exprés», de tejer una «maraña de mentiras, de excusas, de sinvergonzonería y de ocurrencias», mientras su gobierno sigue manteniendo «el diálogo, el decoro o la transparencia»: «Usted no defiende ningún derecho, usted no cree en la justicia, le han pillado señor Gallardo». Concluía la presidenta preguntando con ironía: «¿Cuándo fue la última vez que usted dijo la verdad?».