«Estoy encantada». Yolanda Díaz no entra el trapo. La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social ha evitado replicar a su otrora mentor Pablo Iglesias, quien ha cargado contra ella en las redes sociales por su posicionamiento ... en la controversia generada tras la entrada en vigor de la Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual.
En su periplo por la Comunidad Valenciana, donde este sábado presenta su proyecto político conocido como «Sumar», Yolanda Díaz ha roto su silencio respecto a los efectos generados por la ley del «Sí es sí» en forma de revisión de condenas a los agresores sexuales.
En síntesis, la titular de Trabajo ha pedido no generar «alarma social» con las consecuencias que se están viendo de la aplicación de la normativa y ha eludido pronunciarse sobre los ataques que ha lanzado Podemos contra los jueces. En la línea de Pedro Sánchez, ha subrayado que la normativa es de «extraordinaria importancia para el país» y ha apelado a la prudencia.
Estas palabras han sido replicadas por Pablo Iglesias, quien en un mensaje en redes sociales dirigido de forma velada a Yolanda Díaz ha expresado que «ponerse de perfil» cuando se «machaca a una compañera», en referencia a la ministra de Igualdad, Irene Montero, «no solo es miserable y cobarde, sino políticamente estúpido».
A Yolanda Díaz le esperaban los periodistas este viernes en Elche para obtener un réplica. Preguntada sobre si había leído el tuit de Iglesias y si se sentía aludida, ha respondido simplemente que estaba «encantada» de estar en el barrio de Carrús de la ciudad ilicitana y, en concreto, de asistir al centro cívico Francesc Cantó para reunirse con el sector de aparadoras.
De hecho, Díaz ha alabado el trabajo y la lucha de este colectivo de mujeres en favor de sus derechos laborales, mientras alguna de las personas que aguardaba su llegada le han recibido al grito de «presidenta».
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