Ferrándiz es el asesino más sanguinario de la historia de Castellón y está acusado por los crímenes de cinco mujeres entre 1995 y 1996. Seguía el mismo 'modus operandi', agredía sexualmente a sus víctimas, generalmente tenían entre 18 y 24 años, y después las estrangulaba.
El autor de estos asesinatos ha contado a la experta en psicopatología criminal y forense, Carmen Balfagón, cómo cometió estos asesinatos a las cinco jóvenes. «En ese momento no se piensa, es como un autómata. La mente no da para más y yo creo que se puede tender a hacerlo más fácil», relata.
Ferrándiz detalla que no se acordaba de las caras de sus víctimas: «Si no hubiera sido por las fotografías no sé ni qué cara tenían. Si me hubieran dicho que en vez de llamarse «equis» se llama fulanita yo no lo sabía», cuenta.
El autor de los asesinatos añade además que su mayor ilusión es «ser una persona normal». Estas declaraciones en formato sonoro se enmarcan dentro de una investigación de la Universidad José Cela pilotada por la experta Carmen Balfagon.
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